La manifestación convocada por CCOO y UGT con motivo del Primer de Mayo ha arrancado a las doce del medio día de la Plaza de Neptuno clamando por la igualdad, mejor empleo, mayores salarios y pensiones dignas.

Tras una pancarta en la que reza el lema "Tiempo de Ganar", los secretarios generales de CCOO, Unai Sordo, y UGT, Pepe Álvarez, encabezan la manifestación de Madrid acompañados del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez; del de Unidos Podemos, Pablo Iglesias; y del líder de IU, Alberto Garzón.

El portavoz de Ciudadanos en el Pacto de Toledo, Sergio del Campo, y la diputada de la Asamblea de Madrid del mismo grupo, Victoria Alonso, también han formado parte de la comitiva.

Bajo un cielo despejado y soleado, los manifestantes han comenzado el recorrido, con pancartas moradas con reivindicaciones feministas que rezan "Vivas, libres y unidas", muchas banderas moradas y alusiones también al conflicto que viven los trabajadores del centro logístico de H&M, con pancartas de "hambre y miseria".

Tanto los líderes de UGT como de CCOO lucen pañuelos morados alrededor del cuello, en apoyo al movimiento feminista, y van acompañados, de muchos representantes sindicales, entre otros, de la vicesecretaria general de UGT, Cristina Antoñanzas, también de morado.

La manifestación concluirá en la céntrica Puerta del Sol, donde recibirá a los manifestantes el coro del Teatro de la Zarzuela e intervendrán las compañeras de Igualdad de ambos sindicatos y terminarán el acto los secretarios generales de CCOO y UGT.

Este año los sindicatos celebran el cuarenta aniversario de la primera manifestación legal del Primero de Mayo en Madrid, aunque se lleva celebrando 129 años a nivel mundial, desde 1989.

Entre sus reivindicaciones, los sindicatos reclaman a la patronal una subida salarial nítida en la negociación colectiva, para que los salarios recuperen poder de compra, subiendo por encima de los precios y sobre todo los más bajos.

Asimismo, ven necesario revalorizar las pensiones por encima del 0,25 % que establece la norma actual y consideran el anuncio del Gobierno de subirlas conforme al IPC este año y el que viene un "mero parche" por lo que instan a derogar la reforma de 2013 para que en las tres próximas décadas el sistema continúe siendo público y suficiente.

También se centrarán en la lucha en favor de la igualdad y contra la precariedad laboral, en una mejora de la fiscalidad, mayores ayudas a los refugiados y un mayor apoyo a los sindicalistas pendientes de un juicio.

UGT y CCOO han convocado más de ochenta movilizaciones en más de setenta ciudades de todas las comunidades autónomas.