La Bolsa española ha perdido esta semana el 0,6 por ciento afectada por la guerra comercial que mantiene Estados Unidos con las principales economías del mundo, con lo que ha interrumpido dos semanas de subidas y la recuperación iniciada al comienzo de mes, que habían acercado el índice a los 10.000 puntos.

China comentaba al comienzo de la semana que cargaría con aranceles por importe de 50.000 millones a Estados Unidos, país que advertía la semana pasada de la imposición de aranceles a productos chinos por esa cantidad.

Este país respondía con la amenaza de colocar una tasa por importe de 200.000 millones de dólares a productos chinos, que era respondida por las autoridades chinas. Europa aplicaba aranceles de 2.800 millones a mercaderías estadounidenses en respuesta a los gravámenes al acero y al aluminio del Viejo Continente.

Además, Daimler advertía de que sus resultados se verán afectados en este ejercicio por esta guerra comercial, que afectó a todo el sector automovilístico, ya perjudicado desde el comienzo de la semana por la detención del presidente de Audi por el fraude en las emisiones contaminantes de los vehículos diésel.

El nombramiento en Italia de políticos euroescépticos en cargos relevantes del Parlamento (comisiones económicas), agitaba el mercado de deuda (la prima de riesgo volvía a situarse por encima de 100 puntos básicos), el euro se acercaba a 1,15 dólares y la banca se llevaba un batacazo un poco antes del final de semana.

Sin embargo, el sector financiero, que esta semana seguía soportando la intención declarada del Banco Central Europeo de no subir los tipos de interés hasta el verano del próximo año, fue objeto de algún informe favorable y se recuperaba al final de la semana.

El cártel petrolero OPEP acordaba el viernes aumentar la producción a partir de junio en un millón de barriles diarios y el precio del crudo, que llegó a bajar esta semana a 73 dólares, avanzaba hoy por encima de 75,5 dólares.

Esta semana se han conocido pocos datos económicos relevantes. En Europa mejoraba la actividad económica en junio, que caía en Estados Unidos, donde los indicadores adelantados mostraban cierta ralentización.

En cuanto a la evolución de las principales compañías del mercado nacional, el IBEX 35, dieciséis valores bajaron y subieron diecinueve.

Cie Automotive, que se estrenaba esta semana en el IBEX, registró la mayor caída de este índice, el 11,87 por ciento, por la situación del sector.

Siemens Gamesa se depreció el 5,95 por ciento, en tanto que DIA perdió el 4,99 por ciento e Indra el 4,44 por ciento por ser objeto de un informe desfavorable de una firma de inversión.

Técnicas Reunidas comandó las subidas con un alza del 5,05 por ciento y a continuación se situaron Merlin Properties, que se revalorizó el 3,12 por ciento, y Mapfre, que subió el 2,32 por ciento.

De los grandes valores solo cayeron Iberdrola, el 2,77 por ciento, e Inditex, el 0,4 por ciento. BBVA subió el 1,39 por ciento; Banco Santander el 1,12 por ciento; Repsol el 0,42 por ciento y Telefónica el 0,12 por ciento.

En cuanto a los principales mercados europeos, Fráncfort cayó el 3,13 por ciento arrastrado por el sector automovilístico; París el 2,08 por ciento y Milán el 1,36 por ciento. Londres ganó el 0,63 por ciento después de que el Banco de Inglaterra mantuviera los tipos de interés en el 0,5 por ciento.

La guerra comercial se sintió esta semana en Asia: Hong Kong perdió el 3,2 por ciento y Tokio el 1,47 por ciento.

Los principales índices estadounidenses también bajaban en la semana: el Dow Jones de Industriales el 1,8 por ciento; el S&P 500 el 0,65 por ciento y el tecnológico Nasdaq, que marcaba máximos históricos esta semana, el 0,55 por ciento.