El Gobierno de Marruecos ha celebrado el nuevo acuerdo pesquero cerrado ayer con la Unión Europea (UE) que será aplicable en el Sáhara Occidental, tras el fallo del Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) del pasado febrero, que excluyó las aguas de este territorio del pacto.

Un responsable del Ministerio marroquí de Exteriores, que pidió el anonimato, ha dicho hoy que este nuevo texto respalda la posición de Rabat como "único interlocutor" para negociar cualquier acuerdo internacional que incluya el Sahara Occidental.

En un documento distribuido ayer, el ministerio de Exteriores marroquí ha precisado que la firma del acuerdo pesquero ha permitido "pasar una nueva página en el camino de la superación de las peripecias judiciales y de los ataques vanos de terceros", en alusión al movimiento independentista saharaui Frente Polisario.

El analista marroquí Mehdi Fakir ha considerado el nuevo acuerdo como "un triunfo político" de Marruecos, que pide ser tratado en su globalidad y no de manera restrictiva al excluir el territorio del Sahara.

"Marruecos ha gozado también del apoyo de la Unión Europea que contribuyó a superar las consecuencias del fallo del TJUE", ha subrayado Fakir.

Además, el analista ha agregado que la firma del acuerdo confirma "el apego" de Marruecos a sus relaciones estratégicas con la UE, pese a los cambios geopolíticos marcados por la tendencia internacional hacia el proteccionismo y la orientación de la política exterior marroquí hacia un modelo de cooperación sur-sur.

La UE y Marruecos afirmaron ayer en un comunicado conjunto desde Bruselas que el nuevo acuerdo incluirá una referencia "explícita" a las aguas adyacentes al Sahara Occidental y a la necesidad de distribuir el impacto económico y social de la actividad pesquera entre la población del área.

También se comprometieron a tomar "las medidas necesarias" para cumplir los trámites legales de la adopción por los órganos ejecutivos y legislativos de ambas partes para que el acuerdo entre en vigor lo antes posible.

El anterior convenio permitía el acceso a un máximo de 126 buques de la UE (un centenar españoles) a la zona de pesca de Marruecos en el Atlántico para capturar especies pelágicas y demersales.

A cambio de ello, la UE destinaba una contrapartida económica de 30 millones de euros anuales al Gobierno de Marruecos y otros 10 millones más que aportan los armadores, además de la contratación de entre 1.500 y 1.600 marroquíes para trabajar en los barcos europeos.

En las aguas saharauis se pesca más del 90 % de las capturas de la flota europea en el marco del acuerdo que acaba de expirar el pasado 14 de julio.

En declaraciones a Efe, el copresidente de la comisión euro marroquí de los profesionales de la pesca marítima, Omar Akuri, se ha congratulado del nuevo acuerdo cerrado tras tres meses de negociaciones.

Akuri ha precisado que las "ganancias políticas de este acuerdo son más importantes que las económicas", porque profundiza, en su opinión, "la asociación entre Rabat y Bruselas".