La compañía Iberdrola ha inaugurado hoy en Granadilla (Tenerife) el parque eólico Chimiche II, que producirá 18,4 megavatios y reducirá cada año 34.453 de toneladas de emisiones contaminantes.

El parque, para el que Iberdrola se ha asociado localmente con Inversiones Financieras Isla de Tenerife (IFIT), es el primero de esta compañía en las islas, ha supuesto una inversión de más de 25 millones de euros y en la construcción se han generado 200 puestos de trabajo, ha informado la compañía.

La producción es equivalente al consumo de una población equivalente de 15.000 hogares.

El parque eólico está situado junto a la autopista del sur de Tenerife, y consta de siete aerogeneradores Siemens Gamesa de 80 metros.

A la inauguración han asistido el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, el presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, y el alcalde de Granadilla de Abona, José Domingo Regalado, entre otras autoridades.

Ángeles Santamaría, consejera delegada de Iberdrola España ha señalado que "es necesario reflexionar sobre el papel que van a desempeñar las energías renovables en Canarias, disponer de un marco normativo que aporte certidumbre a la inversión y fórmulas de desarrollo ágiles y transparentes para que su desarrollo aquí sea una realidad".

El proyecto ha incluido la construcción de la línea eléctrica de evacuación y una subestación eléctrica transformadora, que ha requerido el desarrollo de una compleja labor de ingeniería para desplegar la infraestructura eléctrica a través de una orografía compleja con multitud de barrancos, ha indicado Iberdrola en un comunicado.

Iberdrola es el primer productor de energía eólica en España con una potencia instalada de 5.770 megavatios y tiene 700 megavatios en construcción.