Helados, barquillos, turrones y conos pioneros en Canarias

A finales de los años treinta se instalaron en Gran Canaria unas familias de Alicante, de apellido muy conocido en el sector de la heladería: Verdú y Beltra. Empezó una carrera meteórica en la que ambas familias abren heladerías en la capital grancanaria y establecen una sociedad para montar una pequeña fábrica de conos (cucuruchos) que surtiera a todas las heladerías. Fue el nacimiento de Trabel, aunque todavía no fuera ese su nombre. La primera industria en calle La Naval se amplió y trasladó al Muelle Las Palmas donde tenían una heladería y fabricaban conos. Debido al buen funcionamiento del negocio monta la industria en Las Torres, la primera en la zona. Fue la primera y única industria totalmente canaria que fabricaba conos en las islas.

En los años 40 la empresa era de la familia Beltra (de ahí proviene el nombre Trabel), luego pasó a la familia Beneyto Bornai, donde continuó creciendo realizando más modelos de conos e invirtiendo en una maquina semiautomática para un mayor rendimiento y productividad de conos y una de las primeras dragas automáticas que vinieron a Canarias para hacer la oblea para la galleta de corte. En el año 74, Isidro González compra la industria y revoluciona la manera de trabajar de la empresa. En el año 83 se crea la sociedad Productos Trabel que conocemos hasta hoy. Productos Trabel SA se convirtió en los años 90 en líder del mercado de la heladería vendiendo conos y barquillos en las islas.

Continuó creciendo realizando mas modelos de conos e invirtiendo en una máquina semiautomática para la productividad de conos y una de las primeras dragas automáticas que vinieron a Canarias para hacer la oblea para la galleta de corte. Siempre siguió con su variedad de turrones de navidad, mazapanes y almendras rellenas.

Con su horno de tambor cilíndrico de última generación elabora virutones y abanicos de galleta y modernizó esta gama de productos dando una gran versatilidad en cuanto a nuevos formatos y capacidad de producción. Trabel cuenta con un centro en El Carrizal, Ingenio. En su plantilla hay 20 personas. Está en proceso de ampliación de su línea de conos y barquillos y de expansión internacional.