OPA SOBRE TALGO

András Tombor (Magyar Vagon): "No tenemos nada que ver con Rusia"

El representante del consorcio húngaro que ha planteado una opa sobre Talgo defiende que su oferta es la más beneficiosa y la única para mejorar la capacidad industrial del fabricante

András Tombor, de Ganz-Mavag, durante la rueda de prensa para explicar la oferta sobre Talgo

András Tombor, de Ganz-Mavag, durante la rueda de prensa para explicar la oferta sobre Talgo / José Luis Roca

András Tombor responde a las dudas sobre la oferta pública de adquisición (opa) que ha presentado el consorcio húngaro Magyar Vagon sobre Talgo. El empresario que representa a los oferentes considera que la oferta planteada "es la única sobre la mesa que puede ayudar" el fabricante de trenes español y niega mantener cualquier vínculo económico con Rusia después del estallido de la guerra de Ucrania.

El pasado 7 de marzo, Magyar Vagon registró en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) su opa sobre Talgo a cinco euros por acción, que valora la totalidad de la compañía en 619 millones de euros. Desde finales del mes, la Junta de Inversiones Extranjeras (JINVEX), dependiente del Ministerio de Economía, trabaja en la realización de un informe no preceptivo con el que el Consejo de Ministros tomará la decisión de aceptar o rechazar la operación.

En una rueda de prensa con medios de comunicación, András Tombor ha recordado que la oferta de Magyar Vagon es una oferta industrial: "Nuestro plan es convertir a Talgo en una empresa más fuerte dentro del sector ferroviario, pasando de ser un nivel tres a un nivel dos. Talgo se enfrenta a una falta de capacidad industrial, algo que podemos ofrecer en Hungría. Tenemos la capacidad de incrementar la producción drásticamente para que la empresa llegue a superar los 1.000 millones en ingresos al año. Talgo tiene una fantástica tecnología que utiliza en sus trenes, que no tenemos en Hungría, donde sí tenemos la capacidad de desarrollarla".

Reticencias del Gobierno a aceptar la opa

Una de las sospechas del Ejecutivo, que sería motivo para rechazar la opa de Magyar Vagon, son los vínculos del consorcio húngaro con el régimen ruso. Estos han sido negados rotundamente por Tombor: "No tenemos nada que ver con Rusia. No es un secreto que, en el pasado, manteníamos relaciones industriales con una empresa rusa, la cual se disolvió después del inicio del conflicto bélico. Fuimos una de las primeras empresas en dejar de colaborar con los empresarios rusos. El único vínculo actual es un proyecto en Egipto, que debemos acometer porque tenemos un compromiso legal".

El directivo ha asegurado que se ha enterado por la prensa de las reticencias del Gobierno a aceptar la operación, además de que habría planteado la posibilidad de lanzar una contraopa, entre ellas que Criteria participe en una potencial operación o la invitación a participar a otras compañías nacionales e internacionales. Sobre la opción de Skoda, Tombor comenta: "Skoda era un actor principal, pero ahora la empresa está en pérdidas y, por este motivo, no me parece que sea un candidato fuerte con el que colaborar. Es una marca fantástica, aunque no se acerca a Talgo". En el caso de Criteria y CAF, solo ha tenido elogios: "Criteria es una empresa española con gran experiencia y conocimientos, mientras que CAF es una compañía muy seria dentro del sector".

Preservar la españolidad

El empresario húngaro ha repetido en reiteradas ocasiones que está dispuesto a colaborar con todas las instituciones españolas y a hablar con otros inversores. "No tenemos prisa y estamos abiertos a recibir recomendaciones para que el proceso se desarrolle más rápido. Estamos muy abiertos a incorporar capital español en la opa, además de cualquier propuesta por parte del Gobierno y la comunidad empresarial española. Si tiene sentido colaborar con quien fuere, celebraremos los debates pertinentes", ha revelado. A pesar de que están abiertos a esta colaboración, Tombor reconoció que todavía no ha mantenido ninguna reunión con Óscar Puente, ministro de Transportes Movilidad y Agenda Urbana, uno de los principales clientes de Talgo a través de Renfe.

András Tombor ha descrito a Talgo como una empresa "icónica" para España. "La tecnología y el personal son lo más importante y todos se quedarán en España, además manteniendo la dirección actual. Una de las lógicas de nuestro plan es contar con acceso al fantástico conocimiento y gestión existentes. El plan es invitar a directivos e ingenieros de Talgo a Hungría para desarrollar la capacidad industrial y mandar ingenieros y trabajadores húngaros a España", ha añadido.