Grasa por todas partes, comida caducada, ratas muertas... Alberto Chicote no lo tendrá nada fácil, incluso puede convertirse en una auténtica "Pesadilla en la cocina", pero el chef pondrá toda la carne en el asador para salvar los negocios. "He logrado lo que pretendía: echar una mano a gente jodida", asevera.

La cadena privada La Sexta emitió el jueves en "prime time" la adaptación española del formato de éxito internacional "Kitchen Nightmares'', que lanzó a la fama mundial al cocinero británico Gordon Ramsey.

Chicote ya conocía el trabajo de Ramsey. "Me quedé flipado, quería hacer ese programa... Mis jefes de cocina pensaban que cuadraba muy bien el formato", asegura, aunque también avisa que no hará de Gordon. "No sé hacer de otra persona", declara el chef.

Por otro lado, Chicote explica que "Pesadilla en la cocina", que obtuvo en su estreno unos notables índices de audiencia, pretende ayudar a aquellos hosteleros que lo han hecho "fatal". "Hay que ser un auténtico desastre para conseguir que tu restaurante esté vacío", ha añadido.

También adelanta que "todo" lo que verán los espectadores del espacio culinario es cierto, sin guiones: "Me cabreo de verdad. En la cocina me sale algo paramilitar; si no me entra en la cabeza, lo expulso". "Puede haber un ratón en el lavavajillas... Todo lo que veréis en adelante es real", ha insistido.

"Mi objetivo nunca fue hacer tele, pero estoy muy feliz, el resultado ha sido muy bueno", recalcó este "hacedor de los fogones", uno de los pioneros que mezcló la cocina tradicional con la de vanguardia recurriendo a la nueva tecnología.

Una de las facetas anécdóticas que cabe resaltar del cocinero es que, desde hace "unos seis años", luce chaquetillas coloristas creadas en exclusiva por la diseñadora Agatha Ruiz de la Prada, porque le "divierte" y le gusta "mucho" no ponerse "todos los días la misma prenda blanca".

Precisamente, en la presentación del programa mostraba un atuendo rojo y de doble tela con corazones recortados de la peculiar diseñadora de moda.