Disidentes chinos miran hacia Egipto estos días recordando su propia revuelta de hace 22 años, cuando millones de estudiantes pacíficos se manifestaron durante meses en la plaza de Tiananmen de Pekín en una protesta que acabó en masacre.

Mientras la prensa oficial informa de los acontecimientos en Egipto suavizando la revuelta popular, en Internet, que en China tiene su mayor comunidad con 450 millones de suscriptores deseosos de saltarse la censura, han empezado las comparaciones con Tiananmen.

"Estoy pensando en cómo era Pekín hace 22 años, aunque no sepamos bien qué está sucediendo en Egipto, cada soldado es un ser humano, cada uno tiene una expresión distinta. En China fue así hace 22 años", señala hoy un disidente de Tiananmen bajo el pseudónimo de "Chun Xia Zhi Jiao" en su microblog.

Al igual que otros activistas con tecnología para saltarse la censura, éste y decenas de opositores chinos comparan las revoluciones tunecina y egipcia con la que acabó en masacre el 4 de junio de 1989, cuando el Ejército atajó brutalmente la manifestación pacifista en el centro de Pekín.

"Hay que respetar la voluntad y la libertad del pueblo. La gloria sólo puede venir a través de los cambios internos", escribe el abogado de derechos humanos Teng Biao al comparar ambos conflictos en su espacio en "Twitter", censurado en China y sólo accesible mediante "proxy", conexiones que permiten burlar la censura.

Michael Anti, uno de los principales "bloggers" chinos y un analista de la información y la censura que ejerce el régimen de su país, explica cómo la prensa oficial trata el conflicto.

"Los medios chinos han empezado a hablar sobre las revoluciones de Túnez y Egipto", señala Anti, "se preguntan si esa es la manera adecuada de alcanzar la democracia".

Otro activista, Ye Gui, transmite a sus seguidores en su microblog los informes a los que tiene acceso. "La respuesta del pueblo de Egipto ha sorprendido al propio (presidente de EEUU Barack) Obama. Los soldados han creado su propia organización independiente", afirma.

También en "Twitter", el famoso pintor y opositor al régimen Ai Weiwei informa del recuento de muertos en los seis días de revuelta en Egipto y, una vez más, rememora Tiananmen.

"El precio que pagaron en Egipto no alcanza todavía al que nosotros pagamos hace 22 años", señala Ai al referirse a los cientos o miles de muertos de Tiananmen, un conflicto todavía pendiente de un recuento oficial por parte del régimen comunista.

En el llamado "Twitter" chino, la popular red de microblog de Sina.com, "Weibo", un internauta bajo el pseudónimo de Panda explica que "el gobierno se ha empezado a preocupar y la aerolínea Air China ha cancelado los vuelos a El Cairo".

Los comentarios en "Weibo" son menos numerosos que en los sitios prohibidos, y las búsquedas de Egipto en Sina o en Sohu, las mayores web del país asiático, remiten a las páginas de la prensa oficial.

En ellas, las principales cabeceras recogen hoy la revolución egipcia, pero con informes parciales, como la petición de dimisión de Hosni Mubarak a su Gobierno, que aparece en el "China Daily" y en el "Global Times", donde en su versión inglesa se habla de "disturbios antigubernamentales".

Sin embargo, la versión china del "Global Times", llamada "Huang Qiu" tiene un especial en su sitio web sobre la revolución egipcia (www.huanqiu.com), en el que se recogen contenidos oficiales como los retrasos de vuelos entre China y Egipto, la explicación que ha dado el embajador egipcio en Pekín y la protección de los ciudadanos chinos en el país árabe.

En esta página se habla de "movimiento", pero no de "revolución", y se informa de la muerte de unas 150 personas en Egipto.

En otra web informativa que ha abierto un fracasado espacio para comentarios, Ifeng (http://news.ifeng.com), se habla de la problemática en el mundo árabe y en concreto de los problemas que sufre Egipto: falta de empleo, pobreza y retraso económico.

Un portavoz de la cancillería china señaló hoy que la información sobre Egipto aparece con normalidad en los principales canales televisivos, como CCTV, así como en los portales de Sina.com y Sohu.com.