El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó ayer por unanimidad su primera resolución sobre la crisis siria, que supone el envío en las próximas horas de una avanzadilla de 30 observadores militares no armados que verifique el pleno cumplimiento del plan de paz del enviado especial, Kofi Annan.

"Con este voto favorable de los 15, el Consejo de Seguridad de la ONU ha mostrado que juzgará a Siria por sus acciones y no por sus palabras", afirmó al término de esa reunión, su presidenta de turno, la embajadora de Estados Unidos (EEUU), Susan Rice.

Agregó que "la oportunidad está ahí. La responsabilidad recae ahora sobre Siria" y señaló, como representante de Washington, que su país da la bienvenida a la aprobación de esta primera resolución "pero no nos hacemos ilusiones. Hay nuevas informaciones sobre bombardeos, detenciones y muertes", dijo sobre los sucesos de ayer.

Al menos 16 personas murieron por disparos durante un funeral en la ciudad siria de Alepo (norte) y en los bombardeos esporádicos contra Homs (centro), según varios grupos de la oposición, mientras que el régimen del presidente, Bachar Al Asad, acusó a "grupos terroristas" de estos incidentes.

Por primera vez en los más de 13 meses que dura la crisis siria, el Consejo de Seguridad de la ONU se mostró unido para adoptar una resolución al respecto, aunque también se dejaron ver las divergencias que sobre el conflicto tienen EEUU, Reino Unido, Francia y Alemania, por un lado, y Rusia y China, que en dos ocasiones previas vetaron decisiones sobre la situación.

En lo que sí mostraron una misma voz fue en subrayar el resultado de los esfuerzos del emisario especial de la ONU y la Liga Árabe, Kofi Annan, que en seis semanas consiguió diseñar un plan de paz aceptado por el régimen de Damasco y la oposición, que ahora se tiene que implementar por completo, en medio de una frágil tregua. Exige a todas las partes el inmediato fin de la violencia y de las violaciones de los derechos humanos, así como asegurar el acceso de personal humanitario al país, facilitar la transición política siria hacia la democracia, el inicio del diálogo político y permitir el acceso de la prensa.

"No es un menú de opciones, sino un conjunto de obligado cumplimiento", afirmó Rice sobre el plan de paz.

La resolución adoptada permite el envío "de 30 observadores militares desarmados", encargados de "tener contacto con las partes e iniciar un informe sobre la plena implementación del cese de la violencia armada de todo tipo por todas las partes".

El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, y el enviado especial de la ONU y de la Liga Árabe, Kofi Annan, coincidieron en alabar la adopción de la resolución que permite el despliegue de una misión de observadores en Siria y abogaron porque la comunidad internacional mantenga esta unanimidad.

"Doy la bienvenida a la decisión unánime del Consejo de Seguridad de mandar la misión a Siria y estoy muy contento de que haya obtenido tanto apoyo político", afirmó Ban, según especificaron los servicios de información de la ONU mediante un comunicado tras su encuentro en Ginebra, el segundo en una semana.

Ambos pusieron énfasis en la necesidad de que la comunidad internacional hable y actúe con una sola voz en los "próximos días".

Para que los observadores puedan actuar "necesitamos total libertad de movimientos para la misión y que su seguridad sea asegurada por las autoridades sirias", especificó el secretario general, de acuerdo con la citada nota.