El subsecretario general de la ONU para las Operaciones de Paz, Hervé Ladsous, insistió hoy en que la matanza de la ciudad de Hula lleva el sello de Damasco, pero reconoció que la milicia progubernamental Shabiha es "probablemente" responsable de buena parte de las 108 muertes de civiles registradas.

Ladsous aseguró en conferencia de prensa que en Hula hubo víctimas que murieron por fuego de artillería, lo que "apunta claramente a la responsabilidad del Gobierno" sirio, pero destacó que quienes fallecieron "por armas individuales y cuchillos" murieron "probablemente" a manos de "la Shabiha, las milicias locales".

"Sin lugar a dudas el Gobierno de Siria es responsable, porque civiles, incluidos niños, murieron trágicamente por el impacto de armamento pesado. Sólo el Gobierno tiene artillería pesada", afirmó el jefe de los "cascos azules" de la ONU.

Subrayó también que hay "sospechas contundentes" que apuntan a la participación de las milicias.

"No puedo decir que tenemos pruebas absolutas, pero la sospecha está definitivamente ahí", dijo el diplomático francés, quien también explicó que "no hay razón para creer" que los grupos terroristas que han actuado recientemente en Siria estén envueltos en este episodio.

Ladsous calificó la matanza en Hula, donde el viernes murieron 108 personas, de ellos 49 niños y 34 mujeres, de acontecimiento "absolutamente horrible" y aseguró que la misión de la ONU en el país árabe (UNSMIS) no podrá lanzar una investigación detallada de lo ocurrido en esa localidad cercana a Homs "porque los observadores no cuentan con expertos forenses".

El subsecretario general de Naciones Unidas, que confirmó que por el momento los observadores mantienen la cifra de 108 fallecidos en esa población, volvió a defender la vigencia del plan de paz ideado por el enviado especial a Siria, Kofi Annan.

"No hay otro plan, no existe un plan B", subrayó Ladsous, quien reconoció que el principal problema en Siria es que "la violencia no se ha detenido", por lo que llamó una vez más a las partes a cumplir con los puntos del plan de paz de Annan.

"El cese total de la violencia solo puede llegar a iniciativa de las partes sirias. Tienen que entender que esta situación no puede continuar", explicó el jefe de los "cascos azules".

Dijo que se necesitan "avances" en todos los puntos del plan de paz, sobre todo en materia de liberación de detenidos, permisos para protestas pacíficas y también para garantizar el acceso de periodistas internacionales al país árabe.

Ladsous comparecerá el miércoles ante el Consejo de Seguridad de la ONU para exponer la situación en Siria, en un una sesión en la que también se prevé la participación mediante videoconferencia del francés Jean-Marie Guéhenno, estrecho colaborador de Annan.

La reunión del Consejo llega en un momento en que muchos de sus miembros se plantean cuáles deben ser los próximos pasos de la ONU para frenar la crisis siria después de la masacre en Hula, episodio que se considera ya "un punto de inflexión", reconoció hoy ante la prensa el embajador británico, Mark Lyall Grant.

"Muchos miembros creemos que la situación actual en Siria no es sostenible. Han muerto más de 12.000 personas y la masacre en Hula es vista como un punto de inflexión", dijo el diplomático británico, quien mostró además su "firme compromiso" con el plan de Annan, al que definió como "la mejor manera de resolver la crisis sin un derramamiento de sangre excesivo".

Los miembros del Consejo de Seguridad también recibieron hoy un informe por parte del coordinador de la ONU para Oriente Medio, Robert Serry, quien mostró la "extrema preocupación" del organismo ante los últimos acontecimientos en Siria y aseguró que "una solución pacífica a la crisis es la prioridad para Naciones Unidas".