El expresidente del Gobierno español Felipe González decidió salir de Venezuela después de que las autoridades venezolanas le denegaran el permiso para visitar en prisión a los opositores Leopoldo López y Daniel Ceballos.

Así informó el abogado de López y Ceballos, Juan Carlos Gutiérrez. El expresidente no descartó volver a Venezuela para asesorar en la defensa de los líderes opositores, si dispone del visto bueno del gobierno de Maduro.

Gutiérrez también señaló como causa el no de Venezuela a que González pueda ejercer efectivamente de asesor técnico en la vista oral prevista para hoy en Caracas en el marco del proceso judicial contra López.

"Ha decidido no asumir una postura de confrontación con el Gobierno venezolano, ha decidido respetar a las autoridades venezolanas, posición que la defensa de López de Ceballos comparte", dijo Gutiérrez en una conversación telefónica.

El abogado consideró que es "la decisión correcta" porque evita una escalada de tensión con el Palacio de Miraflores y apuesta por "una actitud de respeto y de mediación" que sería más beneficiosa para López y Ceballos.

Interrogado sobre la posibilidad de que González vuelva a Venezuela para ayudar en ambos casos, Gutiérrez reveló que el expresidente español no lo descarta, siempre y cuando cambie la postura del Gobierno de Maduro.

"De tener la autorización, Felipe aseguró que vendría a Venezuela", dijo, detallando así que lo trasladó en la reunión que tuvieron ayer en Caracas. "Confiamos en que las autoridades le permitan entrar en otra vista oral", añadió.

González llegó el pasado domingo a Venezuela procedente de Colombia para sumarse a la defensa de López y Ceballos, encarcelados desde hace más de un año por supuestamente promover la violencia desatada durante las protestas antigubernamentales de 2014.

El expresidente pudo reunirse estos días con el alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, también encarcelado por su presunta implicación en un plan para asesinar a Maduro, pero ahora bajo arresto domiciliario por razones médicas.

"Finalmente, el presidente González visitó a Antonio en su casa por cárcel. Hablaron de paz, justicia y libertad", confirmó la mujer del edil capitalino, Mitzy Capriles.

El Gobierno venezolano ya había advertido de que el trabajo de González no era lícito, enmarcando su presencia en Venezuela en una "campaña internacional contra el chavismo".