Con una reunión de los responsables de Exteriores de Estados Unidos, Rusia, Turquía y Arabia Saudí comenzó hoy en Viena la cumbre ministerial que reunirá mañana a una veintena de países con el objetivo de encontrar un "espacio común" para acabar con la guerra en Siria.

Por primera vez participará en deliberaciones multilaterales de este tipo Irán, junto a Rusia el principal aliado político y militar del régimen sirio de Bachar al Asad.

Los países reunidos en Viena tratan de "definir un espacio común para el comienzo de un proceso político para encontrar una solución a la crisis de Siria", dijo hoy ante la prensa la responsable de política exterior de la Unión Europea, Federica Mogherini.

Calificó como "relevante" el mero hecho que haya sido posible juntar en un mismo ligar a todos los actores de esta crisis, en referencia a Estados Unidos, Rusia, Irán y Arabia Saudí.

"Déjenos ver si el trabajo, bajo coordinación de Estados Unidos y Rusia, nos permite abrir ese espacio político y la posibilidad para una transición política en Siria", señaló Mogherini.

El objetivo de la reunión mañana, concluyó, es sentar las bases para una nueva cumbre a comienzos de noviembre.

El primer encuentro esta noche a cuatro bandas, que comenzó a las 19.00 GMT, estuvo precedido por una serie de reuniones bilaterales, incluyendo una entre el secretario de Estados de Estados Unidos, John Kerry, con su homólogo iraní, Mohamed Yavad Zarif.

A su llegada hoy a Viena, el iraní dijo a la prensa de su país que la República Islámica "nunca aceptará condiciones previas para su presencia en los foros internacionales".

Asimismo, destacó que Irán es "un país con poder para estabilizar la región", al tiempo que denunció que la guerra en Siria se debe a la "intervención extranjera" y al "fortalecimiento de grupos extremistas".

Irán y Rusia, los dos principales aliados han intervenido en favor del régimen sirio, Moscú desde el aire y Teherán con tropas propias y mediante la aliada milicia libanesa Hizbulá.

El bloque occidental, liderado por Estados Unidos, también ha bombardeado objetivos en Siria, mientras que otros como Arabia Saudí o Catar financian a la oposición siria.

En declaraciones a la cadena británica BBC, el ministro de Exteriores saudí, Adel al Yobeir, afirmó hoy que Irán debe aceptar la salida del poder de al Asad, como parte de cualquier solución al conflicto en el país árabe.

El diálogo debe abordar la formación de un Gobierno de transición "con plenos poderes ejecutivos", que debe "mantener las instituciones del Estado, tanto civiles como militares" implicaría siempre la "salida de Al Asad", destacó al Yobeir.

La gran cumbre multilateral comenzará mañana a primera hora de la mañana en el céntrico hotel Imperial de Viena y según la agencia de noticias austríaca APA está previsto una rueda de prensa común de los ministros para las 13.30 hora loca, 12.30 GMT.

A los ministros reunidos hoy se unirán mañana altos responsables de Exteriores de otros 13 países, entre ellos Irán, Alemania, Francia, Reino Unido, China y Omán, así como representantes de la ONU y de la Unió Europea (UE)

La presencia de Omán está considerada como significante debido a su importante papel de mediador en Oriente Medio y sus buenas relaciones con Estados Unidos.

También la participación de China, que acude a Viena con un viceministro de Exteriores, es relevante por sus buenas relaciones tanto con Rusia como con Irán.

Los grandes ausentes en la cumbre de mañana serán las propias partes enfrentadas en la guerra siria, o sea, el régimen de Al Asad y las diferentes fracciones opositoras.