Algunos funcionarios penitenciarios y presos venezolanos están "secuestrados" en la cárcel de Tocuyito, en el estado central de Carabobo, por un grupo de reos amotinados hoy, aseguró la diputada opositora Adriana Pichardo.

"Los reos decidieron tomar el penal, desarmando a los guardias nacionales y mantienen secuestrados como rehenes a dos dirigentes del estado Aragua (...) junto a guardias, custodios y directores de este centro penitenciario", dijo Pichardo en conferencia de prensa.

La parlamentaria subrayó que Alexander Tirado y Raúl Emilio Baduel, dos considerados por la oposición "presos políticos", forman parte del grupo de rehenes sin precisar cuántas personas estarían en poder de los sublevados.

Baduel, hijo de un general que fue ministro de Defensa de Hugo Chavez, y Tirado fueron detenidos en 2014 durante las protestas antigubernamentales, y condenados en 2015 a 8 años de cárcel por haber "instigado a desobediencia de las leyes".

Pichardo aseguró que la situación había sido corroborada por la ministra del servicio penitenciario, Iris Varela, a quien le pidió garantizar la integridad física de Baduel y Tirado, ambos miembros del partido Voluntad Popular (VP) fundado por el opositor encarcelado Leopoldo López.

Varela, por su parte, dijo en la red social Twitter que "no es casual que siempre que se ponen en evidencia los avances del sistema penitenciario, surja alguna situación irregular en las cárceles!", con lo que admitía tácitamente el motín.

Las motivos que generaron el motín no han sido aclarados por la ministra. Algunos medios de comunicación digital sostienen que se debió a la negativa de los presos a ser trasladados a tribunales penales para juzgarles.

Cerca de 55.000 personas forman la población reclusa del país y la ONG Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) habla de un 90 por ciento de hacinamiento en los penales y de más de 6.500 presos muertos durante los últimos 16 años.

El último motín que se conoció en Venezuela ocurrió el pasado marzo, duró cinco días, y terminó con la liberación de 18 carceleros que habían sido retenidos y la muerte de otro.