Entre los más de 6.000 militares detenidos bajo acusaciones de golpismo se hallan también los dos pilotos responsables del derribo de un caza ruso en la frontera sirioturca en noviembre pasado, que provocó una grave crisis entre Ankara y Moscú.

Así lo ha confirmado el ministro de Justicia turco, Bekir Bozdag, en declaraciones recogidas por el diario Habertürk, donde indica que los dos pilotos han pasado a prisión preventiva.

Ya el sábado, el alcalde de Ankara, Melih Gökçek, que pertenece al "núcleo duro" del partido gubernamental, el islamista AKP, había avanzado en declaraciones a la cadena CNNTürk que el derribo del caza ruso se había realizado con la intención de provocar una crisis con Rusia.

"Estoy cien por cien seguro. Estos villanos querían romper nuestras relaciones con Rusia. Querían dejarnos solos ante los políticos del mundo", aseguró el alcalde.

El derribo del caza ruso que volaba en una misión de apoyo al régimen sirio de Bachar al Asad en la frontera sirioturca fue derribado el 24 de noviembre, y Moscú congeló sus relaciones diplomáticas con Ankara después de que el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, se negase a pedir disculpas por el incidente.

Sólo a finales de junio pasado, los dos países rehicieron sus relaciones diplomáticas, tras pedir Erdogan disculpas en una carta a su homólogo ruso, Vladímir Putin.