La ONU criticó hoy la suspensión masiva de jueces y fiscales dispuesta por el Gobierno turco tras el intento de golpe de Estado y sostuvo que "cada caso debe ser examinado antes de manera independiente e individual".

"Una suspensión masiva -como la que ha ocurrido en cuestión de 48 horas, con la remoción de al menos 2.745 jueces y fiscales- no permite una evaluación individual", declaró el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos de la ONU, Zeid Ra''ad Al Husein.

Instó igualmente a las autoridades turcas que no permitan que se violen los derechos humanos "en nombre de la seguridad y en el apuro de castigar a aquellos que se cree que son los responsables".