El líder del Partido Liberal Demócrata, Tim Farron, es el único candidato de los principales partidos que ha prometido en las elecciones generales del Reino Unido un segundo referéndum con el que los británicos podrían rectificar el "brexit".

También es el único que ya se ha enfrentado antes a la primera ministra y líder del Partido Conservador, Theresa May, ya que ambos compitieron por el distrito electoral y feudo laborista de Durham North West en las generales de 1992.

En aquella ocasión, Farron, con 21 años y recién salido de la universidad, quedó tercero por detrás de May, de 36, con lo que ninguno de los dos consiguió el escaño en disputa.

Tras varios intentos más, Farron fue finalmente elegido para el Parlamento en las elecciones generales de 2005, conquistando a los conservadores el distrito de Westmoreland and Lonsdale.

Nacido en 1970 en Lancashire, en el noroeste de Inglaterra, Farron se afilió al Partido Liberal con 16 años, después de unirse primero al grupo ecologista Greenpeace.

Fue estudiante muy activo de Políticas en la Universidad de Newcastle, convirtiéndose en el primer Liberal Demócrata en ser nombrado presidente del sindicato de estudiantes.

Aficionado de toda la vida al Blackburn Rovers, Farron usaba el poco tiempo libre que le dejaba la universidad para jugar al fútbol y es también un amante de la música.

Entre sus ídolos figuran el cantante Joe Strummers, del grupo "The Clash", y el autor de "Las crónicas de Narnia", C.S. Lewis, que, como él, se declara un cristiano comprometido.

Después de graduarse en 1992, año en el que se presentó por primera vez al Parlamento, trabajó como administrador en la Universidad de Lancaster y en el Saint Martins College durante más de una década, hasta ser elegido diputado.

Entre medias se casó con Rosemary Cantley, en el año 2000, con la que tiene cuatro hijos, y viven en el condado de Cumbria, en el norte de Inglaterra.

Como político, su estilo informal en sus discursos y su personalidad simpática y cercana le convirtieron en favorito entre las bases de los liberaldemócratas.

Dentro de su partido es conocida su inclinación hacia el centro-izquierda, sobre todo si se compara con su predecesor, Nick Clegg, y otros que aceptaron puestos ministeriales en el Gobierno de coalición de 2010 con los conservadores de David Cameron.

Le gustaba decir en broma que "no pasó el corte" cuando Clegg asignó los cargos entre sus compañeros de partido, pero Farron se convirtió entonces en presidente del grupo, posicionándose como un "amigo crítico" de la coalición liberal-conservadora y construyendo su base de apoyos entre los activistas de la formación.

Aunque apoyó algunos de los recortes impopulares del Gobierno de coalición, votó en contra del aumento del precio de las matrículas universitarias, medida que resultó devastadora para el Partido Liberal Demócrata, al incumplir una de sus principales promesas electorales.

En las elecciones generales de 2015, Farron fue uno de los ocho parlamentarios que sobrevivieron al hundimiento de su partido, que cayó desde el 23 % de votos en 2010 hasta el 7,9 %.

Tras la dimisión de Nick Clegg, Farron se impuso en las elecciones internas para liderar la agrupación con el 56 % de los votos, gracias a que no había participado en el Gobierno de coalición con los conservadores.

Cuando la actual primera ministra británica, Theresa May, anunció elecciones anticipadas el próximo 8 de junio, Farron fue el único candidato en proponer un segundo referéndum sobre la salida del Reino Unido de la UE.

Para Farron, "esta es una oportunidad de parar a May en su fanática búsqueda de un desastroso ''brexit'' duro, de mantener al Reino Unido en el mercado único, de tener una oposición decente para hacer frente al Gobierno conservador".

Sin embargo, el auge histórico en afiliados al partido y la esperanza de ganarse a buena parte del 48 % del electorado que votó en contra del "brexit" en el referéndum de hace un año, no se han traducido en mejores expectativas de voto para el 8 de junio.

Los resultados de las elecciones locales del pasado 4 de mayo fueron decepcionantes, al perder los liberales hasta 42 concejales, y las últimas encuestas muestran un estancamiento entre el 8 % y el 11 % en intención de voto, un apoyo similar al de las últimas elecciones de 2015.