Jean-Marie Le Pen, líder histórico de la extrema derecha francesa, indicó hoy que renuncia a dar una nueva batalla contra su hija Marine en el congreso del Frente Nacional (FN) que se celebrará el 10 y el 11 de marzo en Lille (norte), en contra de lo que él mismo había anunciado.

En una entrevista a la emisora "RTL", Le Pen padre explicó que no irá a Lille porque no quiere ser "cómplice" de la operación que ha anticipado el secretario general del FN, Steeve Briois, que había dicho que se utilizaría la fuerza para impedir su entrada en el congreso con el argumento de que ha sido expulsado del partido.

A comienzos de mes, el Tribunal de Apelación de Versalles había confirmado la exclusión de Jean-Marie Le Pen, aunque mantiene el estatuto de presidente de honor, que su hija tiene intención de suprimir.

El congreso de Lille, según los planes de su actual presidenta e hija del fundador -con el que está en conflicto abierto-, debe marcar una inflexión en la historia de la formación y terminar con un proceso de consulta para cambiar de nombre.

Jean-Marie Le Pen dijo que está "infinitamente triste por este Frente Nacional", en particular por los "miles y miles de personas que han hecho muchos sacrificios y han dado mucho de ellos mismos, que han suscitado muchas esperanzas. Desgraciadamente, esa aventura me parece que está comprometida por la voluntad de Marine Le Pen".

El veterano político de 89 años, que dejó las riendas del partido en manos de su hija en 2011, señaló hoy que no habla con ella y que su exclusión es "una gran injusticia".