Rusia convocó este viernes a los embajadores de 23 países, entre ellos dos de España, para comunicarles la expulsión de sus diplomáticos en suelo ruso, en el mismo número de agentes rusos que han sido declarados persona ''non grata'' por estos gobiernos, dando así la "respuesta simétrica" que prometió a la reacción internacional por el ataque químico al ex espía Sergei Skripal.

El Ministerio de Exteriores ruso ha informado en un comunicado de que ha convocado a los jefes de las misiones diplomáticas de España, Albania, Australia, Alemania, Canadá, Croacia, Dinamarca, Estonia, Finlandia, Francia, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Macedonia, Moldavia, Noruega, Países Bajos, Polonia, Rumanía, República Checa, Suecia y Ucrania.

"Se les ha entregado una nota de protesta", según la cual, en respuesta a la decisión "poco razonable" de estos países de expulsar a diplomáticos rusos "en base a las acusaciones infundadas de Reino Unido contra Rusia por el llamado caso Skripal", el Kremlin "declara persona ''non grata'' al mismo número de su personal en la Federación Rusa".

En el caso de España, fuentes diplomáticas han confirmado a Europa Press que el embajador en Moscú, Ignacio Ybáñez, ha sido convocado para notificarle que dos diplomáticos españoles han sido declarados persona ''non grata'' como medida de reciprocidad. El departamento que dirige Alfonso Dastis dio la misma consideración a dos diplomáticos rusos en Madrid.

El resto de países mencionados han confirmado la expulsión de trece diplomáticos ucranianos, cuatro alemanes, cuatro canadienses, cuatro polacos, cuatro franceses, tres checos, tres lituanos, dos italianos, dos holandeses, un irlandés, un sueco, un noruego, un finlandés, un croata, un rumano, un estonio y un letón.

De momento, Moldavia, que echó a tres diplomáticos rusos; Australia (dos); Albania (dos); y Macedonia (uno) no se han pronunciado sobre las medidas adoptadas por el Gobierno de Vladimir Putin contra sus misiones diplomáticas en Moscú.

El Kremlin ya anunció el jueves la expulsión de 60 diplomáticos estadounidenses, así como el cierre del consulado norteamericano en San Petersburgo. La Casa Blanca echó al mismo número de agentes rusos y ordenó la clausura de la oficina consular en Seattle.

La Cancillería rusa ha anunciado también que por ahora "se reserva el derecho" a responder más adelante a Bélgica, Hungría, Georgia y Montenegro, dado que se sumaron más tarde a la ola de expulsiones de agentes rusos. Cada uno de estos países echó a un emisario de Putin.

"ACCIONES INJUSTIFICADAS"

Por otra parte, el Ministerio de Exteriores ruso ha precisado que el embajador británico en Moscú, Laurie Bristow, también ha sido convocado y se le ha trasladado igualmente "una enérgica protesta por las acciones provocativas e injustificadas de Reino Unido que inspiraron la expulsión sin fundamento de diplomáticos rusos de varios estados".

Además, se le ha informado de que, al margen de los 23 diplomáticos británicos que ya han sido declarados persona ''non grata, Reino Unido debe recortar la plantilla de sus misiones en Rusia hasta igualar el número del personal diplomático ruso en suelo británico y para ello le ha dado un mes de plazo.

El Foreign Office ha considerado "lamentable" que Rusia haya expulsado a todos estos diplomáticos. "Aunque, a la luz del comportamiento anterior de Rusia, habíamos anticipado la respuesta", ha dicho un portavoz del Ministerio de Exteriores británico a Reuters.

Pese a las tensiones bilaterales, el Ministerio de Lavrov, en uno de los comunicados emitidos este viernes, se ha mostrado dispuesto a cooperar con Londres para la resolución del caso Skripal, "tanto en el marco de los formatos y mecanismos jurídicos internacionales, como a nivel bilateral".

Por su parte, el Ministerio de Exteriores francés ha subrayado que la decisión de Moscú de expulsar a cuatro de sus diplomáticos "no pilla por sorpresa" a París.

"No podemos más que lamentar y recordar que, hasta la fecha, Rusia se ha negado a aportar los elementos explicativos requeridos sobre el ataque en Salisbury", ha indicado.

Por último, ha recalcado que "mantiene su disponibilidad para un diálogo constructivo con Rusia sobre todos los asuntos internacionales".

En la misma línea, el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha asegurado que Putin quiere reparar los lazos diplomáticos con todos estos países.

CASO SKRIPAL

Skripal y su hija fueron encontrados el pasado 4 de marzo inconscientes en un banco de las calles de Salisbury. Las autoridades británicas determinaron que habían sido envenenados con un agente nervioso de la era soviética y acusaron de ello a Rusia.

El Gobierno de Theresa May expulsó a 23 diplomáticos rusos y pidió a sus aliados internacionales que siguieran sus pasos. Esta semana, 28 países, la mayoría europeos pero también Estados Unidos, Australia o Canadá, han declarado persona ''non grata'' a un total de 130 agentes rusos en sus respectivos territorios en solidaridad con Reino Unido.

Putin, que había anunciado una "respuesta simétrica" a la expulsión masiva de sus agentes, ha negado cualquier responsabilidad en el ataque a los Skripal y acusa a Downing Street de "mentir". Moscú ha lanzado la teoría de que el ataque químico es obra de Londres.

El Foreign Office ha insistido este viernes en que la única conclusión posible es que "Rusia es culpable". "Ha violado de forma flagrante el Derecho Internacional y la Convención para la Prohibición de las Armas Químicas y los países de todo el mundo han demostrado la profunda preocupación internacional", ha recalcado.