El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, comenzó hoy su viaje de tres días a China con una visita a la Exposición Internacional de Importaciones de Shanghái en una muestra del apoyo cubano al evento con el que el gigante asiático quiere exhibir su apertura económica al mundo.

En declaraciones exclusivas durante su visita al pabellón cubano en la exposición -la primera dedicada a las importaciones que organiza China-, el presidente afirmó que la cita demuestra el "interés por enfrentar las presiones y las medidas que unilateralmente se toman de proteccionismo contra el comercio libre".

"Para Cuba es una oportunidad de presentar también nuestras potencialidades de comercio en un mercado como el chino y también a nivel internacional", dijo Díaz-Canel en su primera visita como presidente al gigante asiático.

El mandatario explicó que, además de exportaciones tradicionales como el ron o el tabaco, Cuba presenta en Shanghái productos biotecnológicos y farmacéuticos, un ámbito en el que tienen "un desarrollo importante a partir del desarrollo científico del país".

Esto les ha permitido la "innovación en la producción de medicamentos de alta tecnología", apuntó y recalcó la importancia de la feria de importaciones para Cuba, que tiene a China como segundo socio comercial, solo por detrás de Venezuela.

Cuba fue el primer país latinoamericano en establecer en 1960 relaciones diplomáticas con la República Popular China, que se había creado en 1949.

Por su parte, China ha apoyado tradicionalmente a Cuba en los foros internacionales como Naciones Unidas, en los que ha pedido el levantamiento del embargo estadounidense.

El intercambio comercial entre ambos países alcanzó en 2017 cerca de 2.000 millones de dólares.

Díaz-Canel llegó a la exposición acompañado de su esposa, Liz Cuesta Peraza, con quien visitó -entre un gran despliegue de seguridad- el pabellón cubano, donde conversó con sus trabajadores.

También se acercó a visitar el pabellón venezolano, situado justo al lado del cubano en el gigantesco recinto de la feria, que se celebra en el recién inaugurado Centro Nacional de Exposiciones de la capital financiera china.

La delegación cubana en la exposición está integrada por 34 empresas estatales de los sectores de agricultura y alimentación, ciencia, tecnología, informática y comunicaciones, servicios médicos y biotecnología.

Durante la feria está prevista la celebración de un foro entre empresas de ambos países para promover la cooperación bilateral y en el que Cuba tratará de ampliar su oferta exportadora hacia China.

También se prevé la firma de acuerdos en materia de comercio, energías renovables, turismo y tecnología, así como la intensificación de la cooperación en el marco de la iniciativa de la Franja y la Ruta, el multimillonario proyecto chino de inversión a nivel global.

El mandatario cubano aterrizó en Shanghái desde Pionyang, donde ayer se reunió con el líder norcoreano, Kim Jong-un, dentro de una gira que le ha llevado también a Rusia.

Fuentes de la delegación cubana indicaron que el presidente se desplazará mañana a Pekín donde se reunirá con el jefe de Estado chino, Xi Jinping.

Aunque se trata de su primera visita como presidente, Díaz-Canel ya se entrevistó con Xi Jinping en 2013 en el marco de una gira por Asia que realizó con el cargo que desempeñaba entonces de primer vicepresidente del Consejo de Estado.

El presidente cubano tiene previsto reunirse igualmente con el primer ministro chino, Li Keqiang, el viceprimer ministro, Wang Yang, y el presidente de la Asamblea Popular Nacional, Li Zhanshu.

China espera que la visita de Díaz-Canel permita seguir fortaleciendo los lazos bilaterales "de amistad" que unen a ambos países, señaló un comunicado del Ministerio de Exteriores.

Además de Díaz-Canel, a la exposición de Shanghái han asistido otros dos presidentes latinoamericanos, el República Dominicana, Danilo Medina, y el de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén.

Mañana llegará también al evento de la capital financiera china el presidente de Panamá, Juan Carlos Varela.