El volcán submarino de El Hierro continúa arrojando material magmático a la superficie del Mar de las Calmas, según informa el Gobierno de Canarias en un comunicado.

Durante la mañana científicos del Instituto Geográfico Nacional (IGN) han confirmado a la dirección del Plan de Protección Civil por Riesgo Volcánico (PEVOLCA), que desde la costa eran apreciables numerosos fragmentos de lava, confirmando la incesante actividad del volcán.

En los próximos días miembros del IGN, con la colaboración de Salvamento Marítimo, intentarán recoger algunas muestras que serán analizadas para continuar con el estudio de esta erupción que pronto cumplirá tres meses de actividad.

Este jueves, 5 de enero, la señal del tremor registrada por las estaciones sísmicas de la red de vigilancia del IGN tuvo una débil disminución hasta alcanzar un valor mínimo sobre las 02.30 horas, que se prolongó hasta las 04.30 horas.

Aquí, dio comienzo un paulatino incremento hasta que a las 08.00 horas recuperó el valor del comienzo del día, manteniéndolo prácticamente durante las horas restantes.

La sismicidad es prácticamente nula y sólo se localizó a las 00.02 horas un movimiento en el Mar de las Calmas, con magnitud 1.8 en la escala de Richter y a una profundidad de 13 kilómetros, que no fue sentido por la población. En total, desde el día 19 de Julio de 2011 se han localizado 11.962 eventos. DEFORMACIÓN Y MANCHA

Por su parte, las estaciones de control de deformación muestran en general un patrón de estabilidad en las componentes horizontales y verticales.

En las estaciones de El Golfo se observa un ligero desplazamiento al sur y en las situadas al sur de la isla, una tendencia vertical de deflación.

Finalmente, en las primeras horas del día ha sido muy visible la cabecera de color claro, con un área central de burbujeo, rodeada de una extensa zona de color marrón por el contenido de material fino en suspensión.

No se apreciaron fragmentos de lava en superficie y debido a las condiciones del mar y viento, durante el resto del día no se apreció la zona anómala.