La escudería italiana Ferrari ha emitido un comunicado en el que, además de tomar conocimiento de la decisión del Tribunal de Gran Instancia de París, manifiesta que esta evaluando la posibilidad de seguir las acciones legales emprendidas y el que no inscribirá para el mundial de 2010, si no se llega a un acuerdo.

El comunicado señala que: "Ferrari confirma su intención de trabajar en el ámbito de la FOTA (Asociación de Equipos de Fórmula Uno) y en colaboración con la FIA y con los poseedores de los derechos comerciales, para una Formula Uno, cuyas normas sean iguales para todos y se garantice la estabilidad reglamentaria, prosiguiendo en el metódico y progresivo proceso de disminución de costes iniciado los meses pasados". Añade el comunicado "Si no fuese posible encontrar un acuerdo entre las partes implicadas, según decidió en Consejo de Administración del 12 de mayo pasado, Ferrari no procederá a la inscripción de sus monoplazas en una competición que vería, con el escenario actualmente en vigor, como se hacen de menos las características que han hecho de la Fórmula Uno la máxima expresión del deporte automovilístico", claro y contundente.