La alternativa de que el presidente del Tenerife, Miguel Concepción, se decante por recibir el asesoramiento del máximo mandatario del Granada, Quique Pina, para crear el proyecto de la próxima campaña va ganando enteros. A falta de que las partes detallen los pormenores de la que podría ser una relación novedosa en la historia del club blanquiazul, ya van surgiendo los nombres de los profesionales que participarían en el intento del Tenerife de volver a Segunda A.

El más relevante es el de la persona que configuraría la plantilla. Se trata de Pedro Cordero, que en la actualidad es analista técnico del Granada y también trabaja para una fundación del Real Madrid dedicada a impartir clases a presos. Además, es hermano de Juan Carlos Cordero, el director deportivo y vicepresidente del Granada. O sea, el sustituto de Juanjo Lorenzo sería una persona de total confianza de Quique Pina.

Una vez establecido este puente entre el club de Los Cármenes y el del Heliodoro, empezaría a coger forma el nuevo plantel blanquiazul con futbolistas que pertenecen al Granada o que fueron adquiridos por el Udinese para cederlos luego al conjunto andaluz. En el primer caso, los principales candidatos a venir a la Isla son el defensa Jonathan Rosales, los centrocampistas Pedro Barrancos y Tetteh Abdul (Ghana) y el delantero Matías Alonso (Uruguay), cedidos al Guijuelo, Logroñés, Leganés y Atlético Cerro, respectivamente. También podrían tener cabida los colombianos del Granada B Jeison Murillo y Wilson Cuero, a los que se les queda corta la Primera Regional de Andalucía. En cuanto a los jugadores adquiridos por el Udinese que están vinculados al Granada, ya se barajan los nombres de Tariq Spezie, Felipe Sanchón o el fichaje de invierno del Tenerife Ritchie Kitoko. Los dos primeros también militan a préstamo en clubes de Segunda División, el Huesca y el Nástic de Tarragona. A esta lista de posibles refuerzos habría que añadir futbolistas que descarte este verano el Granada, cuyo plantel se renovará en mayor medida si logra el ascenso a Primera. Queda la duda de si Cordero (Pina) optaría por mantener a David Amaral o si elegiría a otro entrenador.

El plan del dirigente granadino y del tinerfeño empezó a fraguarse el pasado 1 de mayo, cuando el Tenerife visitó Los Cármenes. Antes del partido, en el almuerzo institucional, y luego en el palco del estadio, los presidentes tuvieron la oportunidad de conversar y sentar las bases de un convenio que no es oficial. Fuentes del club blanquiazul aseguran que el ofrecimiento de Pina sí se produjo, pero que el interés del Tenerife se reduce a la posibilidad de reforzar la plantilla en Segunda B con jugadores procedentes del Granada y del Udinese, y que en ningún caso aceptarían entregarle el mando del proyecto deportivo a Quique Pina. No obstante, en el entorno del principal rector del Granada afirman que el acuerdo es más que firme y que Cordero vendrá a la Isla para diseñar la plantilla 2011/2012.

El vínculo de Pina con el Tenerife resolvería su propósito de encontrar un equipo en Segunda B en el que pueda seguir formando a jóvenes valores del Granada y del Udinese. En un principio, la idea era asociarse con un club de la misma provincia, el Maracena, equipo que se quedó fuera de la fase de ascenso a la categoría de bronce. La aparición en escena de Miguel Concepción le abrió a Pina una opción mucho más atractiva.

¿Cuál es la relación de Pina con el Udinese? Enrique Pina Campuzano pasó de ser jugador a representante de futbolistas, para dar luego un paso más y adquirir el desaparecido Ciudad de Murcia. Esa experiencia lo situó en otro plano, el de la gestión de clubes, y lo acercó a su actual proyecto, el del Granada CF, al que sacó del pozo de la Segunda B y está próximo a llevarlo a Primera División. Con el respaldo económico del hijo del dueño del Udinese, Gino Pozzo, Pina se convirtió en el administrador único de Daxian, la empresa que compró la mayor parte de la deuda del club andaluz.

De esta manera comenzó una estrecha relación entre el Udinese (Pozzo) y el Granada (Pina), en la que la búsqueda de jugadores con proyección y su formación en el propio equipo rojiblanco o en otros a modo de cesión (¿Tenerife?) ha sido constante y una manera de participar activamente en el competitivo mercado del fútbol. Los resultados están siendo positivos: el ejemplo está en el crecimiento del Granada y la cuarta plaza del Udinese en la Serie A de Italia.