El 4 de septiembre de 1991 es una fecha con mucho significado para los dos jefes de los banquillos del campo en el que este domingo se enfrentarán el Sporting B y el Tenerife. Y es que ese día Abelardo Fernández y Álvaro Cervera, ahora técnicos del filial gijonés y del equipo blanquiazul, respectivamente, debutaron como jugadores de la selección española absoluta. Fue muy cerca del lugar en el que se reencontrarán dentro de dos días, Oviedo, concretamente en el estadio Carlos Tartiere -el antiguo-, y en un duelo amistoso con Uruguay. La anécdota tiene más sustancia de la aparente.

"La Roja" había dejado atrás la decepcionante etapa liderada por Luis Suárez. La prematura eliminación en el Mundial de Italia 1990, la deficiente fase de clasificación para la Eurocopa de Suecia de 1992 y algunas sorprendentes derrotas en partidos de ensayo obligaron a los dirigentes de la Federación Española de Fútbol, con Ángel María Villar al frente, a dar un giro en el rumbo de la selección. Irureta, Luis Aragonés o Javier Clemente fueron algunos de los candidatos que se barajaron para relevar a Suárez, pero el elegido fue Vicente Miera, quien había estado al mando de la sub''21 en una etapa anterior. El combinado nacional fue el siguiente destino profesional del asturiano después de que entrenara al Tenerife en las veinte primeras jornadas de la Liga 1989-1990, la del regreso del conjunto blanquiazul a Primera tras 29 campañas de ausencia.

Por tanto, aquella noche en Oviedo no debutaron únicamente Abelardo y Álvaro. También lo hizo Miera, quien quiso darle su toque personal a la convocatoria apostando por jóvenes valores que había tenido a sus órdenes en las categorías inferiores de la selección. Abelardo, un prometedor central del Sporting, y Álvaro, un habilidoso y veloz interior del Mallorca, fueron dos de los elegidos.

El primero formó parte de una alineación titular en la que también formaron Zubizarreta, Sanchís, Solozábal, Eusebio, Míchel, Martín Vázquez, Vizcaíno, Butragueño, Goicoechea y Manolo. Cervera intervino en el último cuarto de hora, sustituyendo a Manolo, que marcó uno de los dos goles locales (2-1). El otro fue obra de Martín Vázquez. Buyo, el extinerfeñista Albert Ferrer y Cristóbal y Berto, que también debutaron ese día, tuvieron minutos tras el descanso.

En realidad no fue una fecha feliz para la historia de "La Roja", dado que, pese a no disputar un partido oficial, quedó eliminada para la Eurocopa de Suecia de 1992 aquella misma noche. Dependía de que Checoslovaquia derrotara a Francia para seguir con opciones y el equipo entrenado entonces por Platini no falló. Un mes más tarde, el 12 de octubre de 1991 y en Sevilla, Álvaro y Abelardo volvieron a jugar juntos con la absoluta, esta vez en un duelo oficial, pero ya sin alicientes colectivos. Francia, con el pasaporte sellado para el campeonato de Europa, derrotó por 1-2 a una eliminada España. El ahora entrenador del Sporting B fue titular y marcó el gol, mientras que el técnico del Tenerife jugó como reserva.

Álvaro fue internacional dos veces más, con Clemente y en la fase de clasificación del Mundial de 1994, pero no coincidió con Abelardo.