Teatro para viajar al siglo XVI en la casa en la que se crio el Padre Anchieta

El inmueble puede ser visitado durante esta semana tras su reciente rehabilitación

Rutas teatralizadas en la Casa Anchieta

Arturo Jiménez

D. Ramos

Todavía huele a renovación, a barniz, a esos olores que suelen quedar tras las obras. La Casa Anchieta, junto a la plaza del Adelantado, en pleno casco histórico de La Laguna, vive estos días una especie de presentación en sociedad después de los trabajos de rehabilitación que se han realizado en ella. Y lo hace de la mano de la compañía Burka Teatro, que ofreció en la tarde de ayer los primeros pases para mostrar el inmueble en el que se crió San José de Anchieta, el segundo santo de Canarias y el primero de La Laguna.

El historiador y divulgador Néstor Verona hace de guía y dos actores de Burka van entrando y saliendo de escena. Son pequeñas píldoras teatrales que permiten un pequeño viaje hasta el siglo XVI. Estos representan a Juan de Anchieta, padre de San José de Anchieta y escribano, y Francisco de Alzola, fiscal inquisidor. Se trata de un recorrido dinámico: Verona va realizando algunos apuntes históricos y, de pronto, momento de Anchieta (padre) y Alzola. Unas 30 personas asistieron al primero de los recorridos.

En concreto, el programa de puertas abiertas se desarrolla desde ayer hasta el domingo 30 de junio, con un total de 18 visitas guiadas y de carácter gratuito. Salvo el jueves, que la Casa Anchieta permanecerá cerrada, las instalaciones estarán abiertas desde las 17:00 hasta las 20:00 horas, con pases cada hora en punto, mientras que el domingo abrirá en horario de mañana, entre las 10:30 y las 14:00 horas, con visitas a las 10:30, 11:45 y 13:00 horas. El aforo por recorrido estará limitado a 30 personas, por orden de llegada, y se incluirán tres sesiones con intérpretes de lengua de signos.

El director escénico de Burka Teatro, Nacho Almenar, comprobaba este lunes desde el público que todo marchaba según lo previsto. Esta compañía, fundada en 2003, no es nueva representando la vida de Anchieta ni contando la historia lagunera a través del teatro. Las reacciones entre el público parecían de agrado. «Siempre digo que solamente conociendo nuestro patrimonio es como lo valoramos realmente», manifestó Néstor Verona al término del primer pase. «Es la única forma de conseguir que entre todos conservemos el patrimonio», expresó el historiador.

La Laguna viaja al siglo XVI con las primeras Jornadas de puertas abiertas de la Casa Anchieta.

La Laguna viaja al siglo XVI con las primeras Jornadas de puertas abiertas de la Casa Anchieta. / E. D.

Como se recordará, y tras algunos avatares, la decisión del grupo de gobierno del Ayuntamiento de La Laguna es que este inmueble sea el primer centro de interpretación de Canarias sobre la figura y el tiempo del Padre Anchieta, «con un modelo que se va a acordar entre todas las instituciones especializadas, organizaciones locales e internacionales y colectivos vecinales, a través del Consejo Municipal de Patrimonio, que hemos constituido hace unos días», apuntó el Consistorio en una nota de prensa.

Paredes blancas y madera

Paredes blancas, madera, piedra y cristal marcan tras la rehabilitación este edificio emblemático, construido originalmente en el siglo XVI, si bien fue reconstruido un siglo después por Diego Benítez de Anchieta y presenta modificaciones importantes del siglo XIX, mientras que la fachada principal fue remodelada en 1905 por Mariano Estanga.

«Utilizado inicialmente como casa unifamiliar de Nuño Pérez, a su muerte pasó a su viuda Mencía Díaz de Clavijo (que da nombre a la plaza trasera que ocupa la que fuera huerta de la propiedad) y su posterior esposo Juan de Anchieta, capitán y notario público, padres de un José de Anchieta que vivió aquí durante los primeros 14 años de su vida», explicó Verona en la nota, y añadió este lunes que se están cumpliendo diez años de la canonización de San José de Anchieta.

Una de las curiosidades del espacio es que fue la residencia del poeta Manuel Verdugo Bartlett, sede del colegio mayor femenino Virgen de la Candelaria, de la Escuela de Actores de Canarias y, temporalmente, del Obispado de Tenerife tras el incendio del Palacio Salazar, además de almacén de parte del archivo municipal, hasta que se detectaron unos problemas que obligaron a su cierre y restauración.

Más en detalle, la Casa fue inscrita como Bien de Interés Cultural el 14 de marzo de 1986, hoy incorporada al ámbito del conjunto histórico declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Y allí residió San José de Anchieta hasta su marcha a Coimbra, desde donde viajó a Brasil como misionero jesuita.

Nacido en San Cristóbal de La Laguna en 1534, San José de Anchieta es considerado el primer poeta nacido en Canarias, además de lingüista, dramaturgo, médico, arquitecto, botánico e ingeniero. «Este religioso humanista supo aunar el apostolado en tierras del Brasil con el respeto a la diversidad, la promoción de la paz y el entendimiento entre pueblos y el esfuerzo creador, conservándose una amplia obra escrita en latín, español, portugués y tupí, la lengua de los indígenas del actual Brasil», destacaron desde el Ayuntamiento de La Laguna.