Este domingo fue el día grande de Valle Jiménez. Actos desde por la mañana hasta por la noche en honor de la Virgen de Fátima y, sobre todo, una nueva edición de la costumbre más imbricada en su identidad: las carreras de barcos típicos alrededor de la iglesia. Estas estructuras -tanto grandes como pequeñas- dan vueltas tiradas por reses y los guayeros intentan completar el recorrido en el menor tiempo posible. Este año con novedad: uno de ellos no fue tirado por vacas, como es habitual, sino por cabras.

La jornada festiva, sin embargo, empezó antes. A partir de las 10:30 horas dio comienzo la L Feria de Ganado Vacuno. Medio siglo. Esta estuvo acompañada de la feria de artesanía y de la exposición de buchones y palomas finas. Ya a mediodía llegó el turno del juego del palo a cargo de los alumnos de la Escuela Don Pedro Morales, la llegada del Club de Montañeros de Nivaria tras realizar el Camino de Las Lecheras y la representación de una obra teatral rememorando costumbres en torno a las antiguas responsables de distribuir la leche.

Tras la misa y la procesión llegó el momento más esperado. Los barcos giraron alrededor de la iglesia y el público disfrutó de una tradición no exenta de emoción. Las celebraciones continuaron a lo largo de la tarde con la entrega de trofeos a los barqueros, una yincana automovilística y sus correspondientes premios, y, por último, el fin de fiesta musical con fuegos artificiales y la denominada "cogida de la bandera".