Más de 350 explotaciones agrícolas de la comarca del Nordeste se beneficiarán de los 4.500 metros cúbicos diarios de agua desalinizada que saldrán de la nueva EDAR Valle de Guerra (podrá tratar de forma global 9.500 m3 diarios), la nueva infraestructura hidráulica que la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas regional entregó ayer para su gestión al Cabildo insular en un sencillo acto de firma institucional celebrado para la ocasión tras la visita a las instalaciones.
En este caso, la importancia de la instalación, su coste y, lo más importante, su servicio hicieron que la EDAR Valle de Guerra fuera un punto de encuentro político y del mundo del sector primario, encabezando la visita los presidentes del Gobierno de Canarias y el Cabildo insular, Fernando Clavijo y Carlos Alonso, respectivamente; junto a la delegada del Gobierno, Mercedes Roldós, y el consejero regional de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas, Narvay Quintero, que hizo las veces de anfitrión.
Asimismo los alcaldes de La Laguna, Tegueste y Tacoronte, José Alberto Díaz, José Molina y Álvaro Dávila, fueron la representación de los municipios cuyas aguas serán tratadas tras la construcción de los nuevos módulos, maquinarias, sistemas de depuración novedosos, pozos y vasos de aguas y edificios y la futura red de conducciones para irrigar las cerca de 400 fincas de la comarca.
Y se trata de una depuradora que ha necesitado de una inversión de 11,7 millones de euros incluidos en el convenio de Canarias-Estado para obras hidráulicas que está pensada para cubrir las necesidades presentes y futuras de los núcleos urbanos de la zona y su sector primario.
Sobre ello, el presidente del Gobierno, Fernando Clavijo, resaltó "el compromiso de todas las administraciones" para hacer realidad la instalación, recordando que en los próximos 10 años "se invertirán más de 302 millones de euros en infraestructuras hidráulicas" y que depuradoras como la EDAR Valle de Guerra permitirán "el mantenimiento del sector primario en la Isla".
En la misma línea se expresó el titular del Cabildo, Carlos Alonso, quien aludió a los proyectos de las EDAR de la Isla Baja y Güímar como parte del futuro enmarcado en "un ideal y un proyecto" ambicioso y de ámbito insular.
El alcalde lagunero, José Alberto Díaz, recordó que La Laguna fue el primer municipio que abordó la problemática del agua, "un debate utilizado por otras formaciones para hacer daño", destacando que la EDAR "es el fruto de planes proyectados desde hace años", en lo que fue considerado como un guiño a las políticas territoriales del ayuntamiento, Cabildo y Gobierno de Canarias.
Por último, Mercedes Roldós dijo que "se da cumplimiento a los compromisos del Estado con Canarias", haciendo hincapié en la inversión de la EDAR de Buenos Aires como una de las más importantes.