El camino costero de la Punta del Hidalgo -al que actualmente denominan el Sendero Azul- ha conseguido mantenerse a través de los años como un enclave encantador. Pese a mostrar algunas "heridas" -el fuerte desgaste del pavimento del primer tramo, por ejemplo-, el olor a mar y la tranquilidad de la zona se convierten, y más en verano, en un imán para muchos bañistas y deportistas. Y también para los amantes del campismo.
Las quejas vecinales y avisos a la Policía Local por el uso del lugar por ese último perfil de usuario son habituales. Prueba de ello son los comentarios que se han publicado en las últimas fechas en las redes sociales. Sin embargo, y como precisa el concejal de Seguridad Ciudadana -Jonathan Domínguez-, no todos los casos son ilegales: en La Punta no está permitido acampar fuera del campin, pero, en cambio y con matices, las autocaravanas sí pueden hacer uso de este espacio público.
"Lo que pasa es que no es lo mismo una tienda de campaña que una autocaravana que está en un camino público en el que puede estacionar como cualquier otro vehículo, tal y como establece el Reglamento General de Circulación", manifiesta el edil, que señala que reciben "continuamente" llamadas de ciudadanos para alertar de autocaravanas que están aparcadas allí. "Lo que no se les permite es abrir toldos, poner mesitas… En esas condiciones sí se considera que están de acampada y, entonces, se les podría multar por campismo", puntualiza Domínguez.
Sea como fuere, apunta que se están realizando acciones para evitar que se cometan infracciones que puedan afectar al medio ambiente. Un ejemplo es que hasta hace unos diez días la Policía Local había levantado 25 actas por acampadas.
Frente a lo que se podría pensar, y según indica el nacionalista, el problema del campismo fuera de la legalidad disminuye en el término municipal de La Laguna. "Respecto a la Semana Santa del año pasado, cuando hicimos una limpieza grandísima en la zona de El Arenal, el índice de denuncias a personas que estaban acampadas se ha reducido de manera espectacular", informa, antes de expresar que se está ahora mismo en torno al 10-20% de los casos que se producían en aquel entonces. Además, pone de relieve que durante el verano se triplica la presencia policial en la costa.
Si lo habitual en la vía de tierra puntera es la presencia de autocaravanas, la situación cambia ya al final de ese camino, en la zona de San Juanito. Jonathan Domínguez admite que este punto, junto con la playa de El Arenal, es el que más problemas trae en lo que a acampadas ilegales se refiere. Pero hay otras circunstancias.
Fundamentalmente, el espacio elegido por quienes deciden levantar allí su tienda de campaña se sitúa en unas huertas detrás en la trasera de la capilla. Este mismo enclave es utilizado en ocasiones para una práctica más nociva que la anterior: la celebración de fiestas clandestinas, las denominadas "rave parties". No en vano, la proliferación de este fenómeno es uno de los principales ejes de algunas críticas publicadas en las redes sociales.
A lo anterior hay que unir los rituales que se suelen realizar en la zona y que dejan restos junto al mar.