Los incidentes ocurridos en la mañana de ayer en las calles anexas a las Cortes valencianas concluyeron con un saldo de al menos 18 heridos, ocho de ellos policías, y cinco detenidos entre el grupo de seguidores del movimiento 15-M, que reunió a centenares de personas frente a la sede parlamentaria.

La Cámara autonómica celebraba ayer la sesión constitutiva de su octava legislatura, ante lo cual el citado colectivo inició la noche del miércoles una concentración en la calle de Navellos, la vía peatonal que conduce a la entrada principal de este edificio institucional.

Sobre las 07:00, según contó un portavoz del movimiento, la Policía desalojó "pacíficamente" a las decenas de jóvenes que durmieron al raso y seguidamente estableció un perímetro de seguridad colocando vallas en todas las calles anexas al Palau.

Los seguidores relacionados con el movimiento, que aumentaban según avanzaba la mañana, se distribuyeron por diferentes puntos del perímetro, y sobre las 09:00 se registró el primer incidente.

Una joven se negó a moverse de su sitio cuando la Policía trataba de abrir un pasillo para que los funcionarios y diputados accedieran al Parlamento, por lo que fue arrestada por desobediencia y alteración del orden público.

La protesta transcurrió sin altercados hasta el mediodía aunque la tensión fue alta, especialmente entre los agentes antidisturbios y jóvenes radicales que el 15-M no reconoce como seguidores.

Al otro lado de la valla

Sin embargo, cerca de las 13:00 ocurrió el incidente que dio lugar al enfrentamiento: tres agentes traspasaron una de las vallas para denunciar a una joven que les estaba insultando y algunos de sus compañeros trataron de impedirlo, según relató el subdelegado del Gobierno, Luis Felipe Martínez.

La situación dio lugar a una intervención policial en la que algunos activistas fueron golpeados y reducidos por los agentes, que también recibieron puñetazos y el lanzamiento de objetos.

Fuentes del movimiento 15-M aseguran que diez de sus seguidores sufrieron heridas de diversa consideración, entre ellos una mujer de 55 años que fue trasladada al Hospital Clínico con contusiones en la cara y en la cabeza, según indicaron fuentes del Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU).

Asimismo, el CICU informa de tres personas más atendidas en el lugar de los hechos por contusiones leves (una joven de 28 años y dos hombres de 41 y 43). Entre los agentes hubo ocho heridos leves, uno de ellos por el impacto de unas tijeras en la cara, según dijo el subdelegado del Gobierno, quien informó de la detención de cuatro jóvenes durante esta intervención.

El diputado de Compromís Juan Ponce, que estaba detrás de la valla, sufrió un pequeño golpe en su brazo derecho propinado, al parecer, por la porra de un policía.

Después del enfrentamiento, la tensión continuó durante la salida de los diputados e invitados, al finalizar el ágape posterior a la sesión constitutiva.

Algunos de ellos, como el expresident de la Generalitat Joan Lerma, fueron fuertemente increpados durante el trayecto hacia sus coches y requirieron protección policial. Finalmente, sobre las 14:30, coincidiendo con la conclusión de los actos institucionales y festivos programados, los "indignados" se disgregaron y la Policía levantó el cerco de seguridad.

Ante lo sucedido, la coordinadora y portavoz parlamentaria de EU, Marga Sanz, pidió la dimisión de la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ana Botella, al considerar que la intervención policial fue "injustificada".

El portavoz de Compromís, Enric Morera, dijo no entender el dispositivo policial montado para controlar las protestas de los "indignados" cuando se constituyó un parlamento autonómico "con diputados imputados o implicados en casos de corrupción".

Martínez pidió "disculpas" a los afectados por la intervención y "comprensión" hacia los agentes, que a su juicio actuaron con "responsabilidad y profesionalidad".