La Fundación DISA concedió ayer, en colaboración con el Gobierno de Canarias, los Premios Fundación DISA a la Excelencia Académica en el Bachillerato a los mejores expedientes académicos del Archipiélago.

En el acto de entrega presidido por el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, se otorgaron dos galardones a los alumnos de instituto con mejores expedientes de cada isla, además de nueve a nivel regional. Cada uno de estos premios está dotado con una aportación económica de 700 euros y un diploma acreditativo.

Se trata de la primera edición de estos premios de carácter anual que nacen con voluntad de convertirse en una referencia en Canarias.

Para la selección de ganadores se han tenido en cuenta a aquellos alumnos canarios identificados por la Consejería de Educación, Universidades y Sostenibilidad del Ejecutivo canario que finalizaron Bachillerato el pasado mes de junio con una nota igual o superior a 9.

"Es destacable el altísimo nivel de los estudiantes canarios", señaló el director general de la Fundación DISA, Raimundo Baroja.

Tal es así, que en algunos casos, hubo que revisar los criterios de desempate establecidos, al haber varios alumnos con una nota media de 10 tanto en el primer como en el segundo curso de Bachillerato. Para ello, se decidió recurrir, según estaba establecido en las bases, a las notas obtenidas en cursos anteriores, aclaró la Fundación DISA a través de una nota remitida a los medios de comunicación.

"De este modo, desde la Fundación DISA no premiamos solamente un resultado puntual, sino una trayectoria académica excelente, reconociendo el esfuerzo y la constancia, al tiempo que reforzamos nuestra apuesta por el talento y futuro de quienes están llamados a liderar el crecimiento y desarrollo de la sociedad canaria en las próximas décadas", resaltó Raimundo Baroja.

Por su parte, el presidente canario, Paulino Rivero, afirmó que el Gobierno regional "está defendiendo con uñas y dientes la educación pública" ante los recortes impuestos por la Administración central, y alentó a los jóvenes a "movilizar su ambición" en busca de la excelencia.