El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha dicho hoy que le provoca una "tristeza enorme" la imagen de los inmigrantes encaramados en la valla de la frontera de Melilla, pero ha recalcado que no se retirarán las concertinas y que no se puede tener una frontera abierta para que entre todo el mundo que quiera.

Rajoy se ha referido a los intentos masivos de entrada en España por parte de inmigrantes ilegales en una entrevista en la Cadena SER en la que ha asegurado que ha dado y seguirá dando la batalla en Europa para buscar soluciones a este problema.

Entre ellas, aumentar la cooperación con los países origen de esta inmigración.

"En esos países hay gente que no puede vivir y que va a la valla de Melilla, se tira al mar o hace todo lo que puede porque no tiene nada que perder", ha señalado Rajoy, quien ha explicado que su labor para buscar soluciones es apoyada por otros países del sur de Europa como Italia, Francia o Grecia.

Rajoy ha defendido la existencia de concertinas en las vallas, ha dicho que no se van a retirar y ha recordado que son habituales en todos los sitios en los que se protege una frontera y que en España se instalaron por vez primera en 2005, durante el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero.

El jefe del Gobierno ha defendido también la asistencia sanitaria que reciben en España los inmigrantes sin papeles y ha retado a que se diga si hay otro país en el que esa asistencia es mejor.