El que fuera contable del Instituto Nóos, Marco Antonio Tejeiro, ha señalado que su cuñado y exsocio de Iñaki Urdangarin, Diego Torres, urdió una estructura fiduciaria en el extranjero con el objetivo de desviar los fondos obtenidos de forma irregular de las Administraciones públicas y ocultar a sus verdaderos beneficiarios, además de lograr tributar menos que en España.

En su declaración como acusado en el juicio del caso Nóos, que arrancó pasadas las 10.45 horas y ha sido suspendida a las 18.00, ha precisado que en esta red internacional jugaron un papel fundamental las mercantiles Blossom Hills, en Belice, y De Goes For Stakeholder Management, a la par que Torres abrió varias cuentas corrientes personales a las que se transfirió el dinero desde las cuentas del entramado Nóos.

Una vez abiertas, se habrían traspasado a las mismas hasta un total de 420.000 euros desde el Instituto Nóos y 50.000 desde De Goes. Tejeiro ha explicado que De Goes emitió facturas contra el Instituto Nóos que confeccionó y se las entregó su cuñado, para después remitirlas Tejeiro a Salvador Trinxet, el abogado que presuntamente ayudó a urdir esta red de evasión fiscal internacional.

Tejeiro continúa siendo interrogado por el fiscal anticorrupción Pedro Horrach -quedan por interpelarle el resto de acusaciones así como las defensas- quien, ante la descripción de la estructura fiduciaria y las mercantiles utilizadas, ha preguntado con ironía: "¿cuántas empresas pantalla se abrieron? Porque yo ya me he perdido".

Horrach señala en su escrito de acusación que la estructura fue llevada a cabo por Trinxet, especialista en asesoría fiscal internacional y en creación de estructuras societarias fiduciarias, a través de la mercantil de su propiedad Braxton Consulting ubicada en Barcelona. Según su escrito de acusación, el 3 de octubre de 2007 el supuesto testaferro Gustavo Nexton otorgó poder de representación en favor de Torres.

El interrogatorio de Tejeiro proseguirá este viernes, a partir de las 9.45 horas, después de que el excontable haya pedido un descanso en medio de su comparecencia tras más de cinco horas declarando. Continuará inquiriéndole el fiscal.