Varias decenas de ciudadanos saharauis han pedido asilo en los últimos díez días en el aeropuerto de Barajas tras llegar en vuelos procedentes de Argel y, según ha confirmado a Efe uno de los solicitantes, algunos han conseguido la autorización, otros no y varios más aguardan un pronunciamiento en la terminal 1.

En conversación telefónica con Efe, este peticionario de asilo de 30 años ha explicado que llegó a Madrid el pasado día 22 de agosto en un vuelo de Iberia junto a otras 19 personas. Todas ellas solicitaron asilo y a 8 de ellos se les ha concedido, mientras que 12 esperan respuesta.

Asimismo, ha señalado que la semana anterior llegó a Barajas otro grupo numeroso de saharauis que también pidieron asilo, de los cuales 4 "han entrado -sostiene- ya en España" y otros 9 han tenido que volver este mismo viernes en un vuelo a Argel. Otro grupo más, con 23 demandantes, asegura que ha llegado ayer.

"No se espera que lleguen más porque parece que la compañía aérea o las autoridades argelinas han impedido nuevos embarques en vuelos hacia España", ha indicado.

La mayoría de los demandantes de asilo saharauis tienen entre 25 y 35 años y hay tanto hombres como mujeres (una de ellas embarazada), ha precisado este portavoz.

Consultados por Efe, ni el Ministerio del Interior ni la Policía Nacional se han pronunciado acerca de la existencia de este grupo en Barajas y cuál es su situación.

A su llegada a Barajas, tanto los extranjeros inadmitidos, como los peticionarios de asilo son trasladados a unas salas habilitadas para este fin que se encuentran en las terminales 1 y 4 de las instalaciones.

Son propiedad de AENA y están custodiada por el Cuerpo Nacional de Policía y por los vigilantes de seguridad privada del aeropuerto.

Fuentes aeroportuarias han explicado a Efe que cuando un ciudadano extranjero solicita asilo a la policía del control de fronteras del aeropuerto de Barajas, está petición se comunica a la Subdirección General de Asilo para que se inicien los trámites administrativos pertinentes.

En ese momento, los funcionarios de asilo inician el estudio del expediente del peticionario, así como también emite un informe al respecto al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), y en un período de tres días adoptan una resolución, que puede ser tanto la admisión a trámite de la petición de asilo político como su denegación.

En el caso de que la admisión a trámite de la solicitud sea denegada, el demandante puede requerir un nuevo examen de su caso, que es estudiado en un plazo de dos días.

Agotado este plazo, los funcionarios de asilo comunican su decisión y, si la admisión a trámite de la petición de asilo es, de nuevo, denegada, se aplica la Ley de Extranjería, lo que puede llevar al retorno del solicitante a su país de origen o a su entrada en España por razones humanitarias.

Según el Defensor del Pueblo, las solicitudes de protección internacional presentadas en la Oficina de Asilo del aeropuerto de Madrid se han cuadruplicado en los primeros siete mes de 2017, respecto al mismo periodo de 2016.