de personas se han congregado hoy en los colegios de toda Cataluña donde intervinieron la Guardia Civil y la Policía Nacional por el 1-O, suspendido por el Tribunal Constitucional, para mostrar su rechazo a las cargas policiales y mostrar mensajes de paz.
La concentración más mayoritaria se ha producido ante la escuela Ramon Llull, donde hubo una importante carga policial, y donde miles de ciudadanos han hecho ofrendas florales y han proliferado consignas como "este pueblo es imparable".
A esta protesta han asistido representantes políticos e institucionales como la consellera de Enseñanza, Clara Ponsatí (exdirigente de la ANC), y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que ha manifestado sentir "mucha emoción ante la escuela" y ha afirmado que las escuelas de Barcelona son un "modelo de convivencia que nos representan al grito de somos gente de paz".
Desde las puertas de esta escuela, ha partido una manifestación encabezada por la pancarta "la dignidad de un barrio nos hace fuertes como pueblo".
Ante las puertas de la escuela Mediterrània de Barcelona, donde la carga policial causó varios heridos, los concentrados han exhibido una urna, mientras gritaban la consigna "hemos votado".
En el interior del centro educativo, se ha colgado una pancarta con el mensaje "aquí hubo violencia injustificada y arbitraria. Gracias vecinos/as por defender la escuela".
También centenares de vecinos se han congregado ante las puertas del Instituto de Secundaria Joan Fuster de Barcelona, que fue uno de los primeros donde entró la Guardia Civil el 1-O tras reventar una puerta.
La verja perimetral exterior del centro educativo ha quedado decorada con flores, símbolos de paz y corazones elaborados por los alumnos, además de por flores naturales.
En el IES Pau Clarís, por cuya escalera interior cayeron rodando varios ciudadanos a raíz de la carga policial, los ciudadanos han colgados en la fachada mensajes como "Somos pacíficos. Queremos ser libres", "No más violencia", "Ni olvido ni perdón", o "Nunca más nadie nos privará de nuestros derechos. Cataluña libre".
Ante la escuela Verd de Girona, a la que asisten las hijas del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y donde resultaron heridas varias personas, se han manifestado varios centenares de ciudadanos, entre ellos varios bomberos, que han irrumpido en aplausos.
Frente al colegio electoral de Esponellà (Girona) también se han congregado centenares de ciudadanos que portaban banderas independentistas y a los que se han sumado varios alcaldes de la zona del Pla de l''Estany, que han exhibido sus varas en alto.
Centenares de vecinos ha llevado a cabo una concentración silenciosa sentados en el suelo ante la escuela La Mariola de Lleida.
El IES Can Vilumara de L''Hospitalet de Llobregat, cuya alcaldesa, Nuria Marín, se encaró con la Policía Nacional para pedirles que se marchasen, también ha congregado a centenares de ciudadanos que han portado flores y han protestado por la violencia ejercida por la policía.