El empresario Javier López Madrid, uno de los exconsejeros que va a ser juzgado por la salida a Bolsa de Bankia, ha asegurado este martes en el Congreso que ha sido el "mayor perjudicado" por esa operación. Además, ha aprovechado su presencia ante la comisión que investiga la supuesta financiación ilegal del PP para subrayar que si pudiera dar marcha atrás no volvería a entrar en el Consejo de Caja Madrid.

"Perdimos 20 millones de euros y yo, personalmente, un millón de euros. Ya sé que estoy imputado en la salida a Bolsa, estoy imputado y soy la persona más perjudicada de esa salida a Bolsa", ha relatado en respuesta al diputado de Ciudadanos, Toni Cantó.

López Madrid, no ha querido contestar a Cantó si se arrepiente de sus "relaciones con el PP" porque ha insistido en que él no tenía relación con ese partido, aunque sí, por ejemplo, por el que fuera su secretario general en Madrid Francisco Granados, cabecilla de la trama ''Púnica'', en la que él mismo está imputado, al igual que en el caso ''Lezo''.

LA PEOR DECISIÓN DE SU VIDA

Pero ha aprovechado el interrogatorio del diputado naranja para dejar claro que "en la vida entraría otra vez" en el Consejo de Caja Madrid. López Madrid, que fue condenado por el uso de las tarjetas opacas de la entidad, ha explicado que cuando le "invitaron a entrar" le pareció una "buenísima idea" porque, entre otras cosas, le dijeron que la iba a presidir el exdirector gerente y exvicepresidente económico Rodrigo Rato.

Sin embargo, esa fue, según ha enfatizado "la peor decisión" que ha tomado en su vida. "Salí con una imputación", ha recordado, a la vez que ha insistido en que "prácticamente" no utilizó la ''tarjeta black'' que le dieron como miembro del Consejo y que él fue justificando los gastos que hacía pero le dijeron que "no era necesario". "Cuando me fui, antes de la imputación, devolví todas las cantidades que había percibido de Caja Madrid", ha apostillado.