El consejero de Fomento y Medio Ambiente de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, y el alcalde de León, Antonio Silván (PP), mantuvieron conversaciones con el empresario José Luis Ulibarri, encarcelado por el caso "Enredadera", sobre varias adjudicaciones y contratos públicos.

Así consta en las grabaciones de la UDEF que hoy han sido publicadas por varios medios de comunicación y que detallan que fueron los políticos quienes llamaron al constructor leonés para hablar de la marcha de una mesa de contratación, en el caso del regidor, y de la readjudicación de una obra de una carretera, en el del consejero.

Estas grabaciones fueron realizadas en el caso de Silván entre septiembre y octubre de 2017, y muestran cómo en pleno proceso de una mesa contratación para la adjudicación de servicios, el alcalde informaba personalmente de su desarrollo a Ulibarri.

En el caso del también leonés Suárez-Quiñones, juez de profesión y sucesor de Silván en la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, la conversación se data en febrero del presente año, cuando al parecer llamó personalmente al constructor para ofrecerle optar a las obras de una carretera que estaban paralizadas por la quiebra de la empresa inicialmente adjudicataria.

En la conversación transcrita por varios medios de comunicación, Ulibarri afirma tras recibir el ofrecimiento del consejero que la decisión para readjudicar la obra estando la adjudicataria en quiebra tiene que "venir de la mano de la Administración", a lo que Suárez-Quiñones respondió: "yo soy la administración".

José Luis Ulibarri, propietario de varias empresas y medios de comunicación, está además procesado por corrupción en el caso Gürtel y en prisión provisional desde el pasado 5 de julio por su supuesta relación con el caso "Enredadera", que aborda un caso de supuestos amaños en sistemas de gestión del tráfico en municipios de diversas comunidades.

Tras darse a conocer estas grabaciones, el alcalde, que no está investigado en esta causa y que es aforado al ser también procurador en las Cortes, prefiere guardar silencio por el momento, mientras varios partidos, entre ellos Podemos, han pedido su dimisión inmediata, junto a la de Suárez-Quiñones, y otros, como el PSOE y Ciudadanos, han exigido la convocatoria de un pleno extraordinario para que dé explicaciones urgentes y la comparecencia del consejero en las Cortes.

Los socialistas, que han destacado que Silván forma parte de la nueva dirección nacional del PP, han afirmado que las escuchas muestran una actuación "de gravedad", por lo que deben dar una "explicación clara y concreta de su relación con el empresario José Luis Ulibarri".

En el caso del líder autonómico de Podemos, Pablo Fernández, ha pedido la dimisión inmediata de Silván y Suárez-Quiñones: "Es una auténtica vergüenza cómo han parasitado las instituciones, es insoportable el hedor de la corrupción", ha dicho en un tuit.

"Es necesario y urgente que el alcalde Silván explique ante todos los leoneses si sus comportamientos han estado más cerca de la trampa y el compadreo con los presuntos delincuentes que de la objetividad y la transparencia que debe exigirse a cualquier cargo público", ha añadido la portavoz de Cs en el Ayuntamiento de León, donde este partido apoyó la investidura de Silván y sus sucesivos presupuestos.

Además, el secretario general de la UPL, Luis Mariano Santos, ha pedido explicaciones ya que León no se puede permitir estar continuamente el titular del escándalo y ha advertido de que, si éstas no son suficientes, deberá abandonar la política.

Por su parte, el presidente del PP leonés, Juan Martínez Majo, se ha limitado a declarar que "hay que tener un respeto total a la Justicia y a la presunción de inocencia".

En este sentido, Majo ha manifestado que, antes de conocerse los datos del sumario, había hablado tanto con el alcalde como con el concejal implicado en la Operación Enredadera, José María López Benito, y ha opinado que la medida de la dimisión de este último es "suficiente".