El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha hecho un llamamiento a las fuerzas independentistas a superar las "desavenencias y desconfianzas" internas y a construir la máxima "unidad estratégica y electoral" para afrontar con mayores garantías el reto de hacer efectiva la "república catalana".

En una entrevista con Efe, Torra ha subrayado que "la historia demuestra" que "siempre que hay el proyecto más unitario posible, los catalanes tienen más posibilidades" de materializar sus reivindicaciones políticas.

Cuando se cumple un año de la movilización del 20 de septiembre del año pasado frente a la sede de la conselleria de Economía, que motivó luego el encarcelamiento de Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, Torra ha planteado una reflexión "autocrítica" en torno a la unidad de las fuerzas independentistas.

"Yo le pido al independentismo que aprenda algunas lecciones del octubre pasado, y una de ellas es que llegamos con un grado de desconfianza entre los partidos políticos que probablemente no generó toda la fuerza que en esos momentos era necesario generar. Es un punto que hemos de tener muy presente", ha afirmado.

Según el president, de cara al futuro "lo que no puede haber son desavenencias y desconfianzas" entre las fuerzas independentistas.

Haciendo hincapié en su procedencia vinculada a las entidades civiles -en 2015 fue el presidente de Òmnium Cultural-, Torra ha dicho proceder "del soberanismo de base, ese soberanismo al que tanto le da saber qué vecinos tiene a su lado en las manifestaciones del 11 de septiembre o en el referéndum del 1 de octubre".

"Cuanta más unidad estratégica y electoral del independentismo, más posibilidades tenemos", ha asegurado Torra, que se ha mostrado convencido de que "juntos somos más fuertes".

Para remarcar la importancia que tendría configurar candidaturas unitarias del soberanismo en las próximas elecciones municipales y europeas, ha destacado que "una de las lecciones aprendidas del pasado octubre" y de los meses de aplicación del artículo 155 de la Constitución es "lo importante que habría sido tener un alcalde independentista" en Barcelona, porque quizá "las cosas habrían ido diferente".

"En estas elecciones municipales habrá una pieza clave, la capital del país, Barcelona. Probablemente el candidato que gane por al menos un voto será el alcalde, por las dificultades de alianzas. En cualquier caso, es muy importante que el independentismo gane estas elecciones en Barcelona", ha enfatizado.

También se ha mostrado partidario de acordar listas unitarias para las municipales en el conjunto del territorio catalán, para poder tener "muchos más alcaldes independentistas".

Y, de cara a las elecciones europeas, ha defendido la idea de tejer "una candidatura que aglutine el máximo apoyo posible, no sólo de catalanes sino también de vascos, gallegos, valencianos, baleares o canarios, la España de los pueblos que pide que se pueda aplicar el derecho a la autodeterminación".

Ante el hecho de que JxCat, ERC y la CUP, las tres fuerzas del independentismo representadas en el Parlament, carezcan en estos momentos de una hoja de ruta compartida, ha reconocido la necesidad de "encontrar unos denominadores comunes".

Según Torra, hay tres "consensos" básicos en la sociedad catalana sobre los que se puede articular un proyecto común: un referéndum de autodeterminación como "solución política", la "no aceptación" de condenas para los encausados por el proceso soberanista y la "no consideración de la Monarquía como una institución propia de los catalanes".

Asimismo ha negado que el vaticinio del expresidente del Gobierno José María Aznar, en el sentido de que antes de romperse España se rompería Cataluña, se esté cumpliendo.

"No es cierto que la sociedad catalana esté dividida. Hay un debate político, una discusión de fondo muy importante, pero lo que divide a un país no es un debate político, sino si hay una brecha social, si la gente no tiene las mismas oportunidades", ha afirmado.

Con respecto a las negociaciones entre JxCat y ERC para encontrar una solución para los diputados suspendidos por el Tribunal Supremo, Torra no prevé que se tenga que aplazar, por falta de acuerdo, el pleno previsto para el 2 de octubre en el Parlament.

La solución, ha apuntado, no debe pasar por sustituir a los diputados suspendidos, porque "no podemos aceptar que un juez condicione a un Parlamento soberano".