La presidenta de la Junta y candidata del PSOE-A a la reelección, Susana Díaz, ha afeado a PP y Ciudadanos que no tengan la misma "beligerancia" y "contundencia" con la "extrema derecha" de Vox que tienen cuando rechazan al PSOE-A. "Uno se va al notario, otro dice que deja el escaño antes de apoyarme y no tienen esa contundencia con un partido de extrema derecha, es llamativo", ha añadido.

Díaz, en una entrevista en RNE, ha asegurado que quien ha metido a Vox en el debate son PP y Ciudadanos que "no descartan la posibilidad de sumar votos con un partido de la extrema derecha, racista, xenófobo y que no condena la violencia contra las mujeres". En esta línea, ha recordado que por esto preguntó a ambas fuerzas "hasta cuatro veces" durante el debate del pasado lunes y no obtuvo respuesta "en ninguna de ellas".

Para la candidata socialista, es "llamativo" que los candidatos de PP y Ciudadanos, Juanma Moreno y Juan Marín, "que no se aguantan" y que "no tienen fuerza para presentar una alternativa al PSOE-A", no descarten pactar con la "extrema derecha" con tal de "ir en contra" de ella y de su partido. "No sé si Vox entrará en el Parlamento o no, pero el hecho de que blanqueen el discurso de Vox, digan que les suenan bien sus argumentos de un partido que va en contra de las autonomías y no sean capaces de decir que no van a sumar con ellos es llamativo, no todo vale a cualquier precio", ha reiterado.

En el escenario electoral, según ha continuado, hay una coalición oficial que es la de Adelante Andalucía y otra "coalición de derechas", que es la formada por los partidos de Moreno y Marín que atacan con "virulencia y beligerancia" tanto al PSOE-A como como a su gestión en la Junta pero no hacen lo mismo con "un partido de extrema derecha que daña la convivencia". Eso, según ha dicho, contribuye a "alentar un discurso" sobre el que "ya se saben los resultados".

LLAMAR PERO NO PARA "PEDIR APOYOS"

Las encuestas sobre posibles resultados electorales colocan en primer lugar al PSOE-A, pero sin mayoría para formar un gobierno, por lo que Susana Díaz ha asegurado que el día 3 de diciembre, si obtiene la confianza mayoritaria de los ciudadanos, va a llamar al resto de candidatos pero "no para pedirles apoyo" porque eso, según ha dicho se lo habrán dado los andaluces, sino para pedirles que "no bloqueen".

Para Díaz, en la democracia debería haber "una regla" para que "quien no sea capaz de presentar un proyecto alternativo" no pueda "bloquear" las instituciones porque eso "debilita la democracia". "Se está convirtiendo en normal lo anormal", ha dicho, refiriéndose a los 80 días que se tardó en Andalucía en formar gobierno tras las últimas autonómicas y en la repetición de las elecciones generales que hubo que hacer.

Según ha asegurado, "bloquear las instituciones" en el periodo post electoral es "despreciar la decisión de los ciudadanos", por lo que ha criticado que un candidato "se haya ido al notario" para firmar que no apoyará al PSOE-A, otro "diga que deja el escaño" antes de darle su apoyo y otra diga "que ni muerta" respaldaría a los socialistas. "Por eso yo pido una mayoría sólida para que el mes de enero me pille trabajando", ha añadido, al tiempo que ha vuelto a llamar a los partidos que "no bloqueen" el gobierno de la Junta tras los comicios.

PLANTEAR UNA REPETICIÓN ES "DESPRECIAR" EL VOTO

Otra "falta de respeto" al voto de los andaluces es decir, antes de que hayan votado, que habrá una repetición de elecciones, como ponen de manifiesto un sondeo reciente. Del mismo modo, también se "falta el respeto" a Andalucía cuando algunos líderes políticos ponen de manifiesto que las andaluzas son un termómetro de las generales. "Es una irresponsabilidad que a seis días de las elecciones se plantee que habrá una repetición, eso es despreciar el voto de los ciudadanos antes de que se emita", ha dicho Díaz, quien ha añadido que tampoco pueden verse las elecciones en Andalucía en función de los "intereses" de cara a las generales.

Preguntada por si la proximidad de la sentencia del caso de los Ere podría afectar al escenario post electoral que se plantee, Díaz ha preguntado "qué tiene que ver eso con el momento actual si fue algo que se produjo 10 o 15 años antes" de que ella llegara a la Presidencia de la Junta. A lo que sí se ha referido es a la lentitud de la justicia, algo que provoca que la gente perciba que "no es tan justa". "La justicia se lo tiene que hacer mirar porque da la sensación de que quien comete falta la paga y quien comete un grandísimo delito no lo paga", ha dicho.

Además, los casos sobre corrupción que tardan en resolverse hacen que los que no tienen "mancha", como la gestión de su gobierno según ha dicho, se vean atacados por los que "no quieren combatir la corrupción, sino utilizarla". "Cuando uno ve a Moreno que se trajo cajas de folios, otra que no ve lo que hace su partido en Cádiz y otro que llega en el el bus que parecía del ''Tramabús'' o el de ''Hazte Oír'' piensa que estos políticos no están en combatir la corrupción, ,sino en aprovecharse de ella para manchar la imagen de gente honesta", ha señalado.

De otro lado, Díaz se ha pronunciado sobre el acuerdo alcanzado este pasado fin de semana respecto al Brexit, que ha sido un "buen" acuerdo porque se ha plasmado "lo que España quería". Así, ha asegurado que en dicho acuerdo están "recogidas" las preocupaciones de Andalucía: a seguridad de los trabajadores españoles que acuden cada día el Peñón para llevar a cabo su jornada, de los jóvenes que viven en Reino Unido y también la de las zonas de la costa andaluza donde parte de la población residente es británica. "Ese fue el compromiso del presidente del Gobierno que ha cumplido y yo estoy satisfecha", ha aseverado.

Por último, en lo referente a la inmigración, Díaz ha recordado que las políticas en esta materia son competencia estatal que tienen que desarrollarse en el marco de la Unión Europea (UE). Su reivindicación es, según ha dicho, que Europa "mire al sur" para que se combata el tráfico de personas en origen y no conviertan al Mediterráneo en un "mar de dolor". "Tiene que haber un respaldo de la UE", ha dicho, al tiempo que ha explicado que lo que sí es competencia autonómica es la gestión de los menores no acompañados y que esto debería ser una "responsabilidad compartida" de todos los territorios.