La alcaldesa de Santa Úrsula, Milagros Pérez León (PP), quiere evitar polémicas con los municipios vecinos de La Victoria y La Matanza en su lucha contra la subestación de Los Nateros, pero recuerda que su pueblo sufre desde hace casi medio siglo la existencia de una instalación de este tipo en su territorio y advierte: "Santa Úrsula no podría soportar la carga de dos subestaciones eléctricas".

¿Qué posición mantiene su gobierno sobre la polémica de la subestación de Los Nateros?

A nosotros nos han presentado un nuevo proyecto, previsto para La Matanza, y hemos planteado nuestras alegaciones. Santa Úrsula ha sido un municipio bastante solidario con otras localidades por soportar la subestación eléctrica de la subida de La Corujera, creada en los años 60 del siglo XX. Esa infraestructura nos ha causado problemas y quejas vecinales que derivaron, hace unos años, en un compromiso del Gobierno de Canarias y de Endesa de mitigar su impacto mediante un proyecto de "bunkerización". Nosotros pedimos ahora que se minimice el impacto de nuestra subestación y que se soterren el máximo posible de líneas aéreas. Que se cumplan los compromisos adquiridos.

¿Cómo afecta el nuevo proyecto a su municipio?

El impacto aquí será mínimo, prácticamente nulo. Solo se habla de soterrar alguna línea. Pero si llega el caso de que introducen cambios que perjudican a Santa Úrsula, seremos los primeros en salir de la mano de los vecinos a defender nuestros intereses.

¿Sienten que desde otras localidades se les quiere traspasar el problema de la subestación?

Bastante solidarios hemos sido con otros municipios que se benefician de nuestra subestación. No es de recibo que otros que no quieren el impacto de una subestación para ellos se dediquen a echar balones fuera. En ningún caso el nuevo proyecto plantea que la subestación de La Matanza se ubique en Santa Úrsula. Si nosotros llevamos décadas soportando el peso de una infraestructura de este tipo, otros tendrán que soportarlo ahora de forma solidaria. No queremos entrar en polémicas con nadie y por eso no vamos a valorar nada que no sea el proyecto que está en exposición. Me parece muy bien que otros municipios defiendan sus intereses y los de sus vecinos, pero no a costa de echar balones fuera.

¿Podría soportar Santa Úrsula la existencia de dos subestaciones eléctricas en su territorio?

No, de la misma manera que La Matanza no puede soportar el impacto de la nueva que se pretende crear. Este proyecto no habla de El Farrobillo, que está descartado por cuestiones técnicas. Está claro que si otros no pueden con una, Santa Úrsula no podría soportar la carga de dos subestaciones eléctricas.

¿Su gobierno tiene decidido que no volverá a integrarse en la Mancomunidad del Valle?

Lo tenemos clarísimo. No creo que sea necesario montar un nuevo organismo sin sede ni personal para mancomunar lo que pretenden mancomunar. Eso implicaría sobrecargar de trabajo a los funcionarios y generaría gastos extras. Nosotros tampoco compartimos los proyectos en los que van a trabajar. No apostamos por un tanatorio comarcal, ya que los vecinos quieren velar a sus difuntos en su pueblos. Tampoco nos interesa mancomunar el reciclaje de residuos porque ya lo tenemos adjudicado a la Mancomunidad del Nordeste. No vemos necesario sumarnos a otra entidad más.

¿Sigue adelante el proyecto de la granja de alpacas?

Hasta ahora no hemos podido conseguir unos terrenos adecuados, pero seguimos intentándolo. También trabajamos con otras iniciativas como la introducción de cultivos como el mamey, una fruta tropical, o la potenciación de la horticultura. Nuestro objetivo es que la agricultura vuelva a ser la actividad económica principal para muchas familias, no solo una renta extra.

¿El sector primario puede ser una alternativa económica real?

Por supuesto. De hecho, en la actualidad Santa Úrsula está más cultivada que nunca. El reto está en lograr que se salga del cultivo de vid y papas, y se apueste por otras alternativas más productivas.

¿Resulta difícil la convivencia entre los muchos restaurantes y guachinches de su municipio?

Los bares y restaurantes respetan la idiosincrasia del guachinche, siempre que se pongan límitaciones. Nosotros apostamos por la convivencia de ambas actividades, siempre que los guachinches estén dados de alta en Hacienda y en la Seguridad Social, y que vendan vino de producción propia y no más de tres platos y agua. El que quiera mantener su oferta culinaria y abrir todo el año puede darse de alta como bodegón. Una alternativa que ya han elegido muchos. Apostamos por la convivencia regulada, y eso que nuestro pueblo es el que más guachinches tiene registrados, más de 90, de los cinco municipios del Norte de la Isla que tienen esta peculiaridad.

Existen quejas por la ocupación de aceras y aparcamientos por parte de negocios, ¿cuándo regularizarán este uso?

Estamos en ello. El problema es que la carretera que nos atraviesa es de competencia insular. El Cabildo no permite el aprovechamiento de la vía pública en este caso y tenemos que buscar soluciones. Si con la crisis actual y cuestiones como la ley antitabaco, este ayuntamiento actúa de forma drástica contra las terrazas, vamos a quitar su medio de vida a muchas familias. También entendemos las quejas vecinales y, por eso, seguimos trabajando en la creación de una ordenanza que nos permita regular la situación con alternativas como la ampliación de las aceras donde sea necesario.

¿Cuándo se tramitará la aprobación inicial del PGO?

Tenemos previsto que la aprobación inicial del PGO salga a exposición pública en junio. Queremos consensuarlo al máximo.

¿Cómo funciona el pacto de gobierno con el PSC?

Muy bien. Existe un gran entendimiento y las decisiones en ningún caso se toman de forma unilateral. Nuestra comunicación es diaria, constante y continua. Tenemos confianza y diálogo, y funcionamos como un único equipo de trabajo. El proyecto es sólido, y estamos muy satisfechos.

¿Qué proyecto de futuro destacaría entre los que gestiona su gobierno en la actualidad?

Trabajamos para sacar a concesión administrativa la creación de un complejo deportivo. Tenemos la ubicación elegida, existe un anteproyecto y ya trabajamos en el estudio de viabilidad. La idea es que la inversión privada acometa la construcción de un complejo dotado con canchas de pádel para entrenamientos y competición, una de tenis y otra multifuncional, así como ludoteca, cafetería y parque con aparatos de gimnasia para adultos. Hay muchas posibilidades de que salga.