La reciente dimisión del edil de Fiestas y Deportes de Santa Úrsula, Alejandro Alonso (PP), ha confirmado la salida del gobierno local de seis de los ocho concejales populares. La alcaldesa, Milagros Pérez de León (PP), afronta ahora el reto de gobernar con el único apoyo de una concejala del PP, Tamara Medina, y un edil del PSC, Víctor Hernández Barroso, frente a seis excompañeros y ocho representantes de AISU. Pérez afirma que tres personas son suficientes para gobernar y considera que los nacionalistas están detrás de la crisis de su gobierno: "Los seis concejales traidores y AISU son la misma cosa".

¿Un ayuntamiento como el de Santa Úrsula se puede gobernar con una alcaldesa y dos ediles?

Claro. Con los tres que somos da y sobra. Quien me conoce sabe que soy una persona de trabajar y echar muchas horas. Además, hay personal suficiente para llevar todas las áreas. Hará falta hacer un gran esfuerzo, pero saldremos adelante. A lo mejor antes había más capitanes mandando que marineros trabajando. Por eso quiero mandar un mensaje de tranquilidad a los vecinos y decirles que un ayuntamiento se puede gobernar perfectamente solo con tres políticos. Y ya lo están viendo todos los días.

¿Cómo van a organizar las áreas de gobierno?

Tamara Medina llevará Comercio, Turismo y Participación Ciudadana; Víctor H. Barroso mantiene sus áreas, y yo, como alcaldesa, asumiré las que han dejado los demás: Asuntos Generales, Personal, Policía, Agricultura, Medio Ambiente, Fiestas y Deportes.

¿Por qué cree que se rompió su equipo de gobierno?

Si algo pedí a los integrantes de mi grupo de gobierno fue trabajo y trabajo. Desde el primer día les dije que no quería verlos hablando por el móvil en la puerta del ayuntamiento, que no quería verlos sentados en horario de trabajo en una terraza tomando café, que cuidaran su imagen como concejales. Que fueran serios y, además, lo parecieran. Les animé a ser cercanos, a estar al servicio de la gente... En eso fui exigente y rigurosa, lo reconozco. Un político no tiene horario, ni fines de semana, ni días de fiesta... un político no tiene vida propia ni tiempo libre. Estamos las 24 horas del día y los 365 días del año al servicio del ciudadano. Les pedí un análisis de debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades de sus áreas, así como una programación de trabajo anual. Todo en virtud de un pacto avalado por mí, como presidenta del PP local; por el partido, y por ellos mismos, que lo conocían perfectamente. Un acuerdo que, además, se negoció con la presencia del portavoz o cabecilla de la trama (el edil Juan Jorge Afonso).

¿Por qué cree que se fueron?

No supieron subirse al carro de trabajo que les planteé y nunca trabajaron al ritmo ni a la velocidad deseada. Con las carencias y limitaciones que en ese grupo de seis ellos mismos reconocen, me tocó trabajar. Con esos bueyes hubo que arar, valga el símil, pero lo cierto es que nunca cumplieron los objetivos esperados. Creo que si ellos decidieron bajarse del barco y liar la que liaron, fue porque nunca se adaptaron al ritmo de trabajo que les exigía como concejales. Cada día tengo más claro que ellos lo que querían era trabajar menos. Un concejal no puede estar ilocalizable en su móvil o aparecer a trabajar media hora al día.

¿Piensa que AISU está detrás de la marcha de los seis ediles?

Los contactos directos entre algunos de estos concejales y dirigentes de AISU no se pueden negar. Pueden constatarse a través de los listados de llamadas de los teléfonos corporativos del grupo de gobierno. No pueden negarlo. El sol no se puede tapar con un dedo. El cabecilla de la trama y otros ediles traidores mantuvieron reiteradas conversaciones telefónicas con la presidenta de AISU en días claves de toda esta crisis. Antes de presentar la polémica enmienda al plan de ajuste, ese día y en días posteriores, varios de ellos llaman al teléfono fijo y al móvil de la presidenta de AISU, y también hablaron mucho entre todos. Eso es absolutamente demostrable. A día de hoy estoy convencida de que los seis concejales traidores y AISU son la misma cosa. Han entrado en su juego y si siguen así, van a ser responsables de todos los perjuicios que se causen a los vecinos.

¿Teme que sus seis excompañeros y AISU le impidan gobernar?

Los seis traidores ya han pedido un pleno extraordinario para el día 14 para quitar competencias a la junta de gobierno y devolvérselas al pleno. Pido responsabilidad a AISU, ya que si apoyan esta propuesta van a paralizar la gestión municipal, desde la tramitación de subvenciones a la firma de convenios. No solo se van a demorar los asuntos, sino que encima vamos a tener que convocar muchos plenos y comisiones informativas, lo que costará mucho dinero al ayuntamiento. Piden un pleno el día 14 a pesar de que hay otro el día 29. La única explicación que tiene eso, aparte de hacerse notar, es cobrar dietas. Los vecinos deben saber que cada pleno extraordinario que se celebra cuesta al ayuntamiento 3.700 euros en concepto de dietas para los seis traidores y los ocho de AISU. Si hay dos comisiones informativas previas, el coste se eleva en 764 euros más. Eso es un despilfarro. Y si encima su intención es bloquear al gobierno, perjudicarán doblemente a los vecinos.

¿Qué mensaje daría a los vecinos que ven con preocupación lo ocurrido en su gobierno?

Hemos vivido una situación inaudita y de bochorno en el ayuntamiento. Ha sido una vergüenza pública. Los ciudadanos de Santa Úrsula votaron por el cambio en 2011, por el fin del monopolio de AISU. Votaron para terminar con más de 40 años de lo mismo. Después de ese mensaje claro en las urnas, los vecinos se merecían estar tranquilos. Bastante tienen ya con los problemas que existen en muchas familias con la situación económica actual. Los ciudadanos vienen al ayuntamiento a pedir ayuda, no a escuchar que hay una guerra entre políticos. Eso me produce vergüenza ajena y propia. Ajena porque este problema no lo he causado yo, y propia porque lo ha causado gente que elegí yo para mi candidatura. Tengo que reconocer que me equivoqué claramente al hacer la lista electoral. En este caso, la ambición y los personalismos han estado por encima de la vocación de servicio.

¿Cree que alguno de sus excompañeros entregará el acta?

Por responsabilidad y respeto al pueblo, espero que sí lo hagan. Quienes no quieren trabajar por el pueblo y han dimitido o han sido destituidos deberían marcharse.

¿Se siente respaldada por el PP?

Siempre he contado con el apoyo del PP de Tenerife y de Canarias. Es algo patente. Además, ya están en marcha los expedientes disciplinarios contra estos individuos. Y por supuesto también tengo el respaldo de mi comité local.

¿En qué trabaja su gobierno?

Estamos volcados en la regularización consensuada del uso de la vía pública y en acciones de fomento del empleo como el proyecto "Vuelta al campo", que beca a desempleados para que aprendan técnicas de agricultura ecológica y, a la vez, nos permite obtener productos para familias necesitadas. También seguimos en negociaciones con Acciona para recibir la urbanización de La Quinta Roja; preparamos para junio de 2013 el VI Congreso Internacional de Profesionales de Comercio Exterior, y trabajamos en el nuevo Plan General de Ordenación y en el presupuesto de 2013. Nuestra intención es tratar de consensuarlo con AISU antes de final de año y apelamos a su responsabilidad. Esperemos que dejen de estar escondidos detrás de los traidores. Además, quiero dejar claro que en este pueblo se va a seguir ofreciendo cultura, además de agricultura, fiestas o deportes. Este pueblo no es un pueblo de catetos, aunque algunos hayan querido dar esa imagen de Santa Úrsula. Aquí cabe una parranda canaria, pero también el teatro.

¿No intentará negociar el presupuesto con sus excompañeros?

Siempre he sido una persona dispuesta al diálogo. Nuestra idea es reunirnos con los que quieran y con quienes públicamente han dicho que nos tendían la mano en asuntos de interés para el municipio. Ya veremos si hay voluntad y ese ofrecemiento es sincero o no.

¿Le preocupa la situación económica municipal?

Evidentemente hay limitaciones económicas. Arrastramos un déficit de cinco millones de euros, heredados de la gestión de AISU. Ellos nos acusan de generar un déficit añadido de 1,6 millones, pero no dicen que el interventor ya ha dejado claro que ese déficit es fruto de un cambio en la forma de calcular los presupuestos. Antes se trabajaba con previsiones de ingresos y ahora solo con ingresos liquidados. Los superávits de AISU se hubieran convertido en déficit con este sistema de medición. Y ellos lo saben.