El Ayuntamiento de La Orotava ha abierto una nueva vía para rescindir el contrato de arrendamiento del mirador de Humboldt y tratar de recuperar la instalación, adjudicada en 2010 a la empresa Teidesoft por un periodo de 30 años, con cinco de carencia y con una renta mensual de apenas 1.500 euros a partir del sexto año. El inmueble está clausurado por orden judicial, debido a un pleito entre la citada empresa y exempleados.

EL DÍA ha tenido acceso a un decreto del Ayuntamiento de La Orotava que, tras una providencia de la Concejalía de Patrimonio de 9 de abril de 2018 y varios informes jurídicos posteriores, da un plazo de 15 días a la empresa Teidesoft -desde la notificación- para alegar y presentar los documentos y justificaciones pertinentes contra una propuesta de resolución de pleno derecho del contrato de arrendamiento.

El decreto municipal cita dos informes jurídicos emitidos los días 11 y 20 de abril de 2018 por la jefa de área de Recursos Humanos y Actividades Preferentes que señalan que "Teidesoft ha procedido al subarriendo del mirador de Humboldt, de propiedad municipal, sin la autorización del Ayuntamiento de La Orotava y sin ponerlo en conocimiento del mismo en el plazo legalmente establecido".

Además, otro informe de la Tesorería municipal, de 18 de abril de 2018, indica que "no consta ingreso alguno a nombre de Teidesoft, lo que conlleva una resolución de pleno derecho del contrato de arrendamiento suscrito, de conformidad con lo que establece la ley 29/1994 de Arrendamientos Urbanos, modificada por la ley 4/2013".

Cuando concluya el plazo de audiencia a la empresa, en mayo, el Ayuntamiento villero formulará una propuesta de resolución del contrato que, si no se recurre, podría permitir al consistorio recuperar el mirador ocho años después de su adjudicación y casi cuatro años después de su cierre.

Este mirador costó 1,5 millones de euros de dinero público. La obra la ejecutó el Cabildo entre 1999 y 2005. El ayuntamiento asumió la instalación y la adjudicó a Teidesoft en 2006. Pero su costosa y controvertida reforma por defectos, vandalismo y mejoras, retrasó su apertura hasta 2010, cuando se renegoció el polémico contrato que ahora se pretende rescindir.

El mirador de Humboldt se inauguró en diciembre de 2010 tras más de 11 años de obras, polémicas y retrasos. Tras apenas tres años y medio en funcionamiento, y más polémicas, pleitos laborales y cambios irregulares en su gestión, se cerró e intervino judicialmente en julio de 2014. Desde entonces, permanece cerrado y en situación de abandono, pese a ser un edificio que pertenece al Ayuntamiento de La Orotava.

El alcalde villero, Francisco Linares (CC), explicó en marzo de 2017 que el pleito entre la empresa que lo gestionaba y sus trabajadores mantiene el mirador cerrado y expuesto al deterioro. El político nacionalista lamentaba entonces que el consistorio tenía "las llaves del mirador de Humboldt, pero no podemos entrar, ya que existe una prohibición judicial expresa".

La intención del gobierno orotavense es reconvertir este mirador en un centro de interpretación sobre la figura de Humboldt o sobre las cercanas cuevas del Mencey Bencomo.