El proyecto del minitrén de Garachico no incluía vías, pero ha descarrilado. La empresa que gestionaba el pequeño tren turístico de la Villa y Puerto ha renunciado a continuar con el servicio, que comenzó a prestarse el 21 de junio de 2016, según ha adelantado Daute Digital. El alcalde, José Heriberto González (CC), reconoció a EL DÍA que el servicio se ha paralizado desde el pasado 7 de julio y que en sus dos años en marcha "no ha funcionado como esperaban la empresa y el ayuntamiento".

"La empresa ha decidido terminar el servicio y nosotros, sinceramente, tampoco estábamos contentos. Ellos tenían una manera de trabajar y sabemos que hay otras empresas, que optaron al servicio en su día, interesadas en llevarlo de otra manera. Aún no hemos decidido qué hacer, pero no descartamos que pueda recuperarse con otra empresa", recalcó el alcalde.

Respecto a la deuda que mantiene el concesionario con el ayuntamiento, González señaló que es una cuestión que tendrán que resolver los técnicos y los servicios jurídicos municipales con la empresa.

El minitrén ofrecía rutas guiadas mediante audioguías en seis idiomas (español, inglés, alemán, francés, italiano y ruso), y una proyección audiovisual que, durante el recorrido, explicaba de forma sencilla la historia de cada lugar que se visita.

Realizaba un recorrido entre el muelle viejo, el Castillo San Miguel, El Caletón, la ermita de San Roque (junto al nuevo puerto), la parroquia de Santa Ana, el parque Puerta de Tierra, el convento de las Concepcionistas Franciscanas, la iglesia de Nuestra Señora de Los Ángeles y el antiguo convento de San Francisco, junto al ayuntamiento, donde finalizaba el paseo. Nunca se puso en marcha la ruta hacia el barrio alto de El Volcán.

El paseo en minitrén tenía un precio de dos euros para residentes canarios y cinco euros para el resto. Los vecinos de Garachico no pagaban, tampoco los menores de tres años.

La empresa, que ya ha tirado definitivamente la toalla, se planteó inicialmente el objetivo de llegar a mover unas 150.000 personas al año, una media de unas 410 al día. Las cifras reales quedaron muy lejos de esas previsiones.

Sin coches de caballos

Las populares calesas, los coches de caballos que recorrían el casco histórico de Garachico, también han dejado de funcionar temporalmente, "aunque en este caso se debe a una cuestión de salud del concesionario", según afirmó el alcalde, José Heriberto González (CC). "El encargado de las calesas no ha renunciado al servicio, pero sí nos había comunicado que lo suspendería temporalmente porque tenía un problema de salud y debía operarse", detalló el político nacionalista. La intención del grupo de gobierno garachiquense es contactar "próximamente" con el concesionario para "conocer cuáles son sus planes de futuro". De momento, Garachico se quedará también sin los coches de caballos. Este servicio de paseos turísticos en coche de caballos por el casco comenzó a funcionar en septiembre de 2012, con dos carruajes y caballos con herraduras de goma "diseñadas para transitar sobre adoquines y asfalto, ya que parte del trayecto se realizaba por la avenida".