El candidato del PSOE a la Alcaldía portuense, Marco González, advirtió ayer de que, "pese a los anuncios sobre el Complejo Insular de Natación", la ciudad turística "estará sin piscina durante al menos ocho años".

González critica "la decisión precipitada y sin consenso que tomó el alcalde, Lope Afonso (PP), en diciembre de 2015, cuando optó por no arreglar la caldera y procedió al cierre definitivo de la instalación. Una decisión que nos va a costar estar sin piscina municipal durante al menos ocho años, por lo menos hasta 2023 o 2024, siempre que se cumplan los plazos que ahora da el Cabildo insular".

Los socialistas consideran que el anuncio del desbloqueo del proyecto del Centro Insular de Natación no supone una solución a corto plazo, puesto que aún quedaría pendiente el periodo de exposición pública, de 20 días; la posterior licitación de una obra presupuestada en 12,6 millones de euros, y un plazo de ejecución de 40 meses o, lo que es lo mismo, 3 años y 4 meses.

González critica que "sean las familias portuenses las que están sufriendo en primera persona el error de juicio del alcalde que, después de ese cierre, ha venido anunciando cada año el inicio de las obras porque, entre otras cosas, no había ni proyecto para una nueva piscina".

"Se dijo no a arreglar la piscina sin que se hubiera iniciado ni siquiera el proyecto, por lo que el desastre estaba servido", subraya González.

El PSOE insiste en que el Ayuntamiento portuense no debió cerrar la instalación deportiva en diciembre de 2015.