La Viceconsejería de Comunicación y Relación con los Medios, de la Presidencia del Gobierno de Canarias, ha ordenado el cierre de la emisora local Radio Murión, propiedad del empresario vasco César Gil, representante de Inversiones Insulares Cock, con intereses turísticos en la costa de Tazacorte y que ha sido el "azote" de UB-CC durante los últimos años.

Esta medida se produce, según la carta remitida a la emisora por el Ejecutivo de Paulino Rivero, tras las denuncias presentadas los días 22 de enero y 11 de abril, se desconoce si de la competencia o de algún partido político o particular, por determinadas actividades de radiodifusión, lo que motivó la intervención del Servicio de Inspección de Medios de Comunicación, que confirmó que Radio Murión no está en el registro canario de prestadores del servicio de comunicación audiovisual; es decir, es "alegal", igual, por cierto, que otras radios menos "agresivas" con los nacionalistas y que por el contrario no han sido "intervenidas".

El Gobierno de Canarias comprobó además, siempre según se dice en la misiva remitida a la emisora, que Radio Murión se encuentra emitiendo en la banda de FM, en concreto en la 91.0 Mhz.

Ante los hechos comprobados, el Ejecutivo canario exigió a la emisora bagañete, con una audiencia importante en la zona del Valle de Aridane, que cerrara al día siguiente de recibir la carta, con fecha de salida 23 de abril de 2013, lo que, por cierto, no ha cumplido.

En la carta se amenaza a Radio Murión de que, en caso de no cesar de su actividad, podría ser sometido a un expediente sancionador calificado como infracción muy grave, con multas que oscilan entre los 100.001 y los 200.000 euros.