El Gobierno de Canarias y el Cabildo de La Palma mantienen un "pulso" en un asunto que está poniendo en riesgo una parte importante de los presupuestos destinados a distintos proyectos que se deben acometer este año en la Isla Bonita con el respaldo financiero del Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan). Según una información a la que ha tenido acceso este periódico, en el Ejecutivo regional hay un gran malestar por el caso omiso a los requerimientos que se le han realizado a la institución insular que preside Anselmo Pestana. Al menos en tres ocasiones, la administración con mayor rango ha solicitado a la otra parte en conflicto que justifique qué destino se les dio a las partidas que recibió el año pasado. Esa información, que debía estar en poder del Gobierno de Canarias desde el pasado 31 de julio, aún se desconoce.

Por los datos que maneja esta redacción, el Cabildo de La Palma es el único de las Islas que a día de hoy no ha aportado esos datos, pese a los reiterados toques de atención que se le han dado. Fuentes próximas al Gobierno que preside Fernando Clavijo aseguran que la situación es compleja y que, a pesar de que no existe la intención de dañar los intereses de La Palma, las ayudas del Fdcan de este año no van a ser liberadas hasta que se aclaren las cuentas.

El malestar en el Gobierno regional ha aumentado en las últimas horas por el hecho de que las personas que deben dar esas explicaciones ni siquiera atienden las llamadas telefónicas con las que se intenta desbloquear una situación que la pasada semana fue uno de los temas de conversación en la visita que realizó Clavijo a La Palma. El Gobierno de Canarias, incluso, en su afán por buscar una vía de escape, está dispuesto a recibir la parte del dinero de 2017 que no se ha utilizado, en el caso de que no se pueda justificar, para liderar el reparto de esas ayudas.