El Pleno del Cabildo de La Palma ha nombrado hoy Hijo Adoptivo de la isla al artista, recientemente fallecido, Manuel Pereda de Castro.

En una sesión plenaria extraordinaria en la que estuvieron presentes los familiares del consagrado artista cántabro, el presidente insular Anselmo Pestana, hizo lectura de los méritos de Manuel Pereda de Castro para ser nombrado por unanimidad de los consejeros Hijo Adoptivo de La Palma, un expediente que se había iniciado meses atrás y que ahora cobra especial relevancia dado el reciente fallecimiento del artista.

Manuel Pereda de Castro nació en Santander en 1946 y se trasladó a vivir a la isla canaria de La Palma en 1986, donde desarrolló una intensa actividad artística y cultural.

Como se recordó en el acto institucional, Pereda de Castro ya era un reconocido artista escultor cuando llegó a la Isla Bonita, pero fue en La Palma donde inició un excelente trabajo que le llevó a crear obras que son un referente dentro de la vida cultural isleña.

Entre sus obras más conocidas destacan el monumento a la Naturaleza en el municipio de El Paso, también conocido como el Árbol de la Graja; o el monumento a la Madre en Los Llanos.

También supo plasmar con su obra escultórica emblemas de la etnografía local como fueron sus esculturas al Salto del Pastor y a Los Verseadores en Tijarafe.

Pereda de Castro instaló sus esculturas también en ciudades españolas como Madrid, Santander o Villa de Noja, así como países extranjeros como Suiza, Francia, Italia, EEUU, entre otros.

Destacables son también sus retratos a carboncillo y lápices de colores. Así, el edificio consistorial del Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane, cuelga obras suyas de todos los alcaldes municipales desde la época de la República.

Además, Pereda de Castro jugó un papel relevante en la isla durante casi una década con sus escenografías en las principales fiestas locales e insulares; en especial en las Fiestas Lustrales de la Bajada de la Virgen de Las Nieves.

Durante el acto institucional y tras visualizar un vídeo en el que se esbozaba la vida de Pereda de Castro y en el que otros tantos artistas elogiaban su obra, en nombre de la familia intervino su hija Eva Lilith Pereda, quién hizo un breve recorrido por los inicios de la actividad artística del homenajeado.

Así, comentó como desde los ocho años Manuel Pereda ya estaba haciendo esculturas en el taller de un colectivo de artistas en su tierra natal, lo que le llevó a obtener la Medalla de Oro en el certamen nacional para jóvenes escultores con tan solo catorce años.

"Todo su mundo estaba en la escultura, para él las esculturas le hablaban, cobraban vida", dijo la también artista Eva Lilith Pereda.

La hija del artista cántabro señaló además que Manuel Pereda de Castro era un enamorado de La Palma. "No sólo se enamoró de su esposa, la pintora palmera Gloria, sino también de la isla, quizás por su amor a su tierra Cantabria", dijo.

Eva Lilith dijo que su padre deja grandes obras en La Palma, pero también en otros muchos lugares. "Aquí dejó huella y fueron muchos los artistas que se acercaban hasta su estudio para aprender y pedir consejo. Papá era un maestro y le gustaba hacer las cosas a lo grande", concluyó no sin antes dar las gracias por el título concedido por la Corporación Insular.

El título de Hijo Adoptivo de La Palma lo recogió su viuda Gloria de manos del presidente del Cabildo de La Palma, Anselmo Pestana, en medio de la ovación del público asistente al acto.