Santa Cruz de La Palma perderá en unos años, quizás en apenas dos, su principal bolsa de aparcamientos a la entrada a la ciudad, que la Autoridad Portuaria ha dejado claro que necesita para su desarrollo futuro. Tampoco se contempla la construcción de la ansiada plaza del Siglo XXI, mientras que la ampliación del dique principal del muelle, que se calcula en unos 15 millones de euros, tiene proyecto pero no se dispone de financiación en 2019 ni tampoco está prevista para el próximo año.

La reunión de ayer de la comisión puerto-ciudad fue un varapalo en toda regla para los intereses de la capital, que verá claramente cercenado su desarrollo, una realidad alejada de la versión oficial que se describe en la nota de prensa del encuentro.

La Autoridad Portuaria dijo en el comunicado que su presidente, Pedro Suárez, había anunciado ayer la próxima prolongación del dique exterior del puerto en 125 metros, "lo que permitirá la llegada de grandes cruceros que aumentarán el flujo de turistas en la Isla". Al tiempo, subrayó que las nuevas unidades de Fred. Olsen y Naviera Armas "vendrán con más frecuencia, serán de mayor porte y capacidad".

Sin embargo, en el seno de la reunión, el propio Suárez y el director de la Autoridad Portuaria, Luis Santana, manifestaron el interés por esa actuación, pero a la vez reconocieron abiertamente que no se dispone de recursos económicos para el desarrollo de la obra; es decir, la "próxima prolongación" no será tan próxima, según coincidieron en afirmar diferentes fuentes vinculadas al encuentro, donde estaban presentes representantes municipales, incluyendo al alcalde, Sergio Matos, y el presidente insular, Anselmo Pestana. La obra se hará, pero no se sabe cuándo.

Más complejo para la ciudad será digerir la pérdida de su principal bolsa de aparcamientos a la entrada al casco histórico, cuando precisamente el principal problema de Santa Cruz de La Palma es la falta de estacionamientos. La capital diseñó una gran plaza denominada del siglo XXI con un parquin, elemento que entendió determinante para su realce y desarrollo socioeconómico. Sin embargo, la Autoridad Portuaria ha hecho especial hincapié tras la reunión en que ese espacio lo precisa para la expansión del muelle en un futuro cercano, mutilando la idea original que durante décadas ha defendido el ayuntamiento.

A propósito, Luis Santana explicó que debido a la necesidad de contar con zonas de aparcamientos y almacenaje para el crecimiento de las operaciones portuarias, "hay que disponer de ese suelo para asegurar el futuro del puerto, algo que beneficiará a la Isla". Por su parte, Pedro Suárez añadió que "no podemos cederlo a corto plazo, pero mantendremos el uso compartido durante los próximos años para facilitar lo más posible el uso en favor de las actividades de la ciudad".

Durante las próximas Fiestas Lustrales sí se podrá utilizar. Hasta el verano 2020 se mantendrán los aparcamientos. Para 2021 ya es menos probable si el crecimiento portuario se mantiene.

Otra de las cuestiones que se pusieron sobre la mesa fue la construcción de un puerto comercial entre Barranco Seco y Barranco del Carmen. La Autoridad Portuaria apoya esa propuesta, pero el handicap básico de su desarrollo es el coste, estimado en unos 300 millones de euros. Recordar que no están garantizados por ahora los 15 para la ampliación del dique exterior, por lo que pensar en otro muelle es una quimera.