La piscina municipal Acidalio Lorenzo reabrió ayer sus puertas y la actividad diaria se desarrolló con absoluta normalidad, como cualquier otro lunes, después de que el pasado viernes la instalación tuviera que cerrar sus puertas, según fuentes del Ayuntamiento de Santa Cruz para "recoger muestras y analizarlas dentro de un tratamiento preventivo ya programado con antelación",

Así desmienten la denuncia de usuarios, recogida por Alternativa Nacionalista Canaria (ANC), en el sentido de que "por la dejadez del área de Deportes, se desalojan las instalaciones incluso con usuarios dentro de los vasos".

Esa, según ANC, "falta de asistencia y cuidado que ha obligado al cierre de la piscina por motivos de salubridad" es respondida desde el ayuntamiento así: "Todo se debió al adelanto en unas horas, según lo previsto, del último tratamiento preventivo de la serie desarrollada estos días para evitar la habitual aparición de algas con el calor del verano".

Como quiera que el del pasado fin de semana era el último, agregan las fuentes, "se decidió adelantarlo al viernes. Pero el cierre siempre obedeció a una programación, nunca a una alerta por falta de salubridad, o cualquier otro riesgo para los usuarios".

Otra versión la dan algunos usuarios y la recogió ANC: "Al mediodía (del viernes) dos personas con batas blancas, equipadas con dispositivos de análisis e identificados como personal de la Consejería de Sanidad recogieron muestras del agua de la piscina".

Aproximadamente a la media hora, añaden, "el personal de las instalaciones indicó de manera apresurada a las 50 personas que se encontraban en el agua, que debían abandonar de manera urgente los vasos porque Sanidad ordenaba el cierre inmediato por motivos higiénico-sanitarios".

Santiago Hernández, dirigente de ANC, puso de relieve "nuestro malestar por la reiterada dejadez del área de Deportes hacia estas dependencias que, ya sufrieron en los últimos años, y también sobre estas fechas, otros cierres".

En julio de 2013 y finales de 2014, el cierre provisional tuvo precisamente su origen en la aparición de las algas. Para Hernández "aunque pretendan ahora justificar que era una actuación programada, no deberían rebajar el nivel de un desalojo en toda regla".