Apenas 160 euros, correspondientes a una deuda por la licencia de un vado, han dejado fuera, por lo menos en primera instancia, a la empresa que presentó la oferta más ventajosa para derribar el inacabado edificio de aparcamientos de la cabecera de la playa de Las Teresitas, conocido popularmente como "mamotreto".

La compañía afectada, que según fuentes consultadas recurrirá la decisión de la mesa de contratación constituida al efecto, es Insulares de Demoliciones y Obras S.L. Su propuesta económica ascendía a 366.738 euros, sin incluir IGIC.

Lo curioso del caso, y por ahí podría ir la argumentación del recurso que presentará la empresa, es que en la actualidad, y según las mismas fuentes, tiene suscritos varios contratos con Viviendas Municipales, empresa pública dependiente del Consistorio de la capital.

Tras el rechazo a Insulares de Demoliciones y Obras S.L., la mesa de contratación, en su quinta sesión (17 de abril), propuso adjudicar el contrato para demoler el "mamotreto" a la empresa que había presentado la segunda mejor oferta, Excavaciones Bahillo, S.L. En este caso, el precio ascendía a 414.000 euros, también sin incluir IGIC.

Precisamente, ayer se reunió la mesa por sexta vez, en una sesión en la que debía calificar la documentación aportada por el nuevo adjudicatario propuesto, y elevar al órgano de contratación -la Junta de Gobierno Local-, si procedía, la propuesta de adjudicación del contrato.

Sin embargo, y según las mismas fuentes, este hecho tampoco fue posible completarlo ayer al no cumplir Excavaciones Bahillo S.L. con uno de los requisitos que fija el pliego de cláusulas administrativas. Se desconoce, en cualquier caso, si este incumplimiento implicará que se tenga que pasar a la siguiente oferta más ventajosa. De hacerlo, la beneficiada sería la UTE Gestión y Ejecución de Obra Civil S.A./Gestyona Recursos y Proyectos, S.L., cuya propuesta económica fue de 403.261 euros, sin IGIC.

De cualquier forma, y al margen de la adjudicación del contrato, las fuentes consultadas alertaron de que podría existir otra dificultad añadida en este procedimiento, que tiene que ver con una de las mejoras incluidas en el pliego de conficiones: el asfaltado de la parcela completa, unos 11.000 metros cuadrados, que ocupa el "mamotreto", una vez demolido.

Estas fuentes avisan de que el asfaltado podría ser "ilegal" en tanto en cuanto se trata de un suelo no habilitado en estos momentos para ejecutar esas obras.

Fuentes del Ayuntamiento de Santa Cruz cuestionadas por este asunto remarcaron que "no harán comentarios" sobre las mesas de contratación, sino de la propuesta definitiva que se eleve a la Junta de Gobierno Local.