El arquitecto Carlos A. Schwartz pide rebelarse contra "la aberración" de la pérdida de árboles en Santa Cruz de Tenerife que ejemplifican las obras en Méndez Núñez, "un atentado" a un patrimonio vegetal que elogiaron Camilo José Cela o Antonio Muñoz Molina.

El arquitecto y fotógrafo (Santa Cruz, 1942) explica que los árboles forman parte del patrimonio de una ciudad igual que el arquitectónico y escultórico, y tiene que ver con la conservación y el respeto de un entorno habitable.

Pero un día, recuerda, vio que se iniciaban las obras de remodelación en Méndez Núñez con un cartel en el que se explicaban las actuaciones "y descubrí con horror que en un lado de la calle no habría árboles", pues se eliminaban las jacarandas características del lugar.

Entonces comenzó a indagar pero tuvo la sensación de que no avanzaba la resistencia ciudadana "ante algo que parecía manifiestamente impropio", sino que se extendía una especie de resignación ante los hechos consumados.

"Es una aberración", subraya el arquitecto, que no discute si las jacarandas eran la especie más adecuada de la zona y había ejemplares viejos con riesgo de caída en caso de tormentas, pero puntualiza que podrían haberse renovado con árboles de propiedades similares, con gran porte y que generen sombra y frescor en verano.

El ayuntamiento justifica no poner árboles por la ley de Accesibilidad y Schwartz discute que si el precio era "cargarse" una fila de árboles, él no habría remodelado la calle.