"Hemos alcanzado un compromiso para colaborar a la hora de establecer un control que permita cumplir la normativa laboral. Esta última establece una jornada de ocho horas diarias a los asalariados del sector y hemos calculado en 270 los que la doblan para terminar hasta 17 o 18 dentro del taxi. Será una especie de fichaje de entrada y salida que supervisarán técnicos de la Inspección de Trabajo y del Ayuntamiento de Santa Cruz, así como los agentes de la Policía Local". Lo asegura Miguel Ojeda, presidente de Élite Taxi, quien junto a su vicepresidente, Juan Luis León, acudió esta semana a una reunión "muy positiva" desarrollada en la Casa de los Dragos con el concejal de Servicios Públicos, Dámaso Arteaga, funcionarios de su departamento y José Trasobares, jefe de la Inspección de Trabajo de la provincia tinerfeña.

"En el sector del taxi de Santa Cruz hay un grave problema con la duplicidad de licencias municipales", valoró Ojeda quien añadió: "Se trata de vehículos propiedad de personas que no son profesionales del sector sino dueños de empresas privadas e incluso funcionarios públicos. Tiene un sol asalariado que trabaja 16 o 17 horas al día incumpliendo la normativa laboral".

Ojeda insiste: "Estos asalariados están siendo explotados, ya que el convenio regulador del sector del taxi establece para ellos una jornada de ocho horas diarias, cinco días a la semana, un mes de vacaciones retribuidas y cuarenta horas extra al año. Es muy difícil de cumplir a día de hoy y de hecho no se cumple".

El taxista y dirigente del taxi desvela que "el contrato de ocho horas se convierte en la práctica en el doble y en horario continuado. Además de que existe la figura de las falsas vacaciones. Muchos asalariados pasan al paro en verano para disfrutar de unas pagadas por el estado. Cuando vuelve la temporada de otoño-invierno son contratados de nuevo".

Ojeda recuerda: "La sanción para esta práctica está catalogada como muy grave y oscila en una horquilla que va de los 6.000 y los 180.000 euros de multa".

Para las fuentes, "la reunión en el ayuntamiento resultó muy positiva y se ha llegado a un compromiso de colaboración técnica entre Inspección de Trabajo y Consistorio para establecer un control de la jornada de ocho horas diarias. Para ello se establecerá una especie de sistema de fichaje controlado por funcionarios municipales e inspectores, además de por la Policía Local".

Ojeda concluyó: "Tenemos calculadas en unas 270 las licencias que trabajan asalariados durante más de las ocho horas diarias. Diría que mucho más y eso no tiene nada que ver con el contrato que han firmado con su empresario. Ellos no lo van a denunciar porque no pueden, pero después de este acuerdo será posible regular una situación descontrolada que perjudica a todo el sector, no solo a los profesionales directamente afectados por la situación diaria".

"El concejal Dámaso Arteaga miente"

Las manifestaciones del concejal de Servicios Públicos Dámaso Arteaga en la última Comisión de Control -dejó claro que "de la mano con el sector sí, siempre, pero sin presiones ni amenazas como las manifestaciones"- son respondidas por Miguel Ojeda: "El sector del taxi no cree en la falsa hoja de ruta del señor Arteaga. Es mentira que no haya plazo para el rescate porque desde Servicios Públicos han llamado a compañeros para decirles que este año no pueden entrar. Y han mandado un escrito a las asociaciones más representativas sobre que está cerrado el plazo".

Ojeda cree que "lo de voluntario hay que eliminarlo porque están obligados al proceso por la Ley de Transporte de Canarias que exige que nuestras licencias sean rentables. Un proceso que se remonta a diez años y debía haber culminado entonces, antes de la inauguración del tranvía en junio de 2007".

Ojeda rechaza la supuesta mejoría e invita al concejal "a que trabaje en mi taxi una semana para que compruebe nuestra ruina". Al respecto valora que "el 95% de los turistas se va en guaguas, en el Bus Turístico o en el tren y al sector del taxi le queda un miserable 5%. ¿Desde cuando no se ven siete cruceros en el muelle? La nueva estación y las plataformas petrolíferas han reducido el espacio y los atraques".

En cuanto a la subida de tarifas valora: "El propio economista que el ayuntamiento contrató ha establecido que, pese a la equiparación de tarifa urbana e interurbana, la pérdida cada año por unidad está entre 9.000 y 11.000 euros. El taxista no percibe salario y vive de los gastos del vehículo. Cada vez más endeudado".

Por último, en cuanto a la retirada de licencias, Ojeda señala: "Equiparar mejora de la situación con frenazo en la opción del rescate es faltar a la verdad. Han cometido un grave error porque ya advertimos hace dos años que activaran el tanteo y el retracto".

Sentencia para concluir: "Hace seis meses que este colectivo convocó seis manifestaciones para diciembre en caso de que no se cumplieran los objetivo. Ni se han cumplido ni se van a cumplir. Esto demuestra lo poco que le importa al ayuntamiento el pueblo de Santa Cruz visto la que se puede liar en esas fechas navideñas".